La provincia de Alicante, es una zona privilegiada para desarrollar lo ecológico en el viñedo. La sanidad del mismo, el calor, la falta de agua o humedades constantes y la facilidad de tratamiento de algunas variedades (a pesar de ser obstáculos para algunos asuntos) son un viento a favor en este sentido. La prueba está en el cada día mayor desarrollo de esta línea de productos que hace enorgullecerse de tener aquí a una bodega que es la que mayor certificación por el Comité de Agricultura Ecológica realiza y es la más importante de la Comunidad Valenciana, y por tanto, de España. Se trata de la Bodega de Pinoso, donde el sol duro, los inviernos extremos, pero secos y la variedad monastrell, han permitido desarrollar este concepto. Así lo llevan haciendo desde 1997.
Control en el campo
El trabajo es exhaustivo en el control de campo y hay que aplaudir aquí el trabajo realizado por los técnicos de cooperativas en controlar y transmitir a los viticultores el hecho de no utilizar plaguicidas, fertilizantes químicos y recurrir a la mayor naturalidad. Se une a ello la facilidad de elaboración de vinos sin apenas participación de elementos externos (conservantes o aditivos químicos) en esta zona. Alicante tiene, entre otros, ese privilegio. También hay que decir que, aunque en muchos casos, las empresas no estén certificadas por el CAE (Comité de Agricultura Ecológica) muchas otras apenas utilizan nada, logrando un producto lo más natural, sostenible y con la mayor expresión de su origen.
Junto a Pinoso, también es la Cooperativa de la Algueña una de las más atraídas por este concepto. Su tinto «Alhenia» ecológico es ideal para postres, por su suavidad y ése algo golosón. O el «EKO» de Murviedro, uno de los últimos lanzamientos de la bodega. Un vino elaborado a partir de una selección de viñedos de cultivo ecológico certificados, de nuestra Monastrell.
También Santa Catalina del Mañán tiene este compromiso con la naturaleza y ha logrado ampliar sus hectáreas, haciendo que este valle del Medio Vinalopó sea una de las zonas más ecológicas de nuestra región. Sus rico «Chardonnay» o algunos de sus tintos disfrutan de esta distinción.
Bocopa apuesta por lo ecológico
Junto a ellos Bocopa ha ampliado su cultivo por la zona en ecológico y dispone de varios vinos certificados con el apellido «Eco». Así podemos encontrar una gama de «Laudum» y «Castillo de Alicante» muy interesantes. Como puede verse el trabajo de las cooperativas en este sentido ha sido vital para el desarrollo sostenible de la zona y la sensibilidad para los cultivadores. Y cada día extienden su trabajo a nuevos parcelas y vinos.
En cuanto a bodegas privadas hay que destacar el trabajo de Bodegas Francisco Gómez en Villena, cuya totalidad de producción está en ecológico y combina ciertas ideas de biodinámica. Una técnica que además amplia al olivar y resto de cultivos de la impresionante Hacienda La Serrata. Un privilegio para el consumidor que puede conocerlo muy cerca.
Un sector en crecimiento
Los vinos ecológicos continúan su crecimiento y se espera que el ejemplo cunda. Aunque es cierto que son países extranjeros -y en particular los centroeuropeos- los que más valoran estos productos y demandan la garantía de un origen y una certificación ecológica (sello que se distingue en muchos productos). A veces se piensa que son más caros, pero la relación calidad-precio de los Vinos Alicante DOP es tan buena que apenas se notará la diferencia (si la hay?) en estos productos y el consumidor podrá disfrutar de su calidad con toda naturalidad.
