Orihuela irriadia cultura, pasión y entrega. La capital de la comarca de la Vega Baja se llena de pólvora, música, marchas festeras y de espéctaculos propios para conmemorar un hito histórico, la Reconquista cristiana.
Las fiestas de Moros y Cristianos de la ciudad oriolana son parte de un legado que se mantiene vivo con el paso de los siglos y que tienen el reconocimiento de ser de Interés Turístico comunitario, desde 2010.
Sus orígenes se remontan al año 1974, fecha en la que un reducido grupo de oriolanos quiso arropar la Fiesta de la Reconquista de Orihuela del dominio sarraceno, ocurrida en 1242 ó 1243.
Así, el desfile de la enseña del Oriol, que asciende y desciende por el balcón del Ayuntamiento se convierte en un acontecimiento de gran valor historiográfico, unido a los desfiles de Moros y Cristianos, que emergieron hace cuarenta años, según los testimonios de la propia historia.
Y es que, la historia festera de Orihuela está estrechamente ligada a la época posterior de la expulsión de los moriscos de Espala, entre 1579 a 1609. Fechas en las que según recoge la propia junta de los Moros y Cristianos de Orihuela se celebraban fiestas y simulacros de batallas entre los dos bandos, que acabaron siendo conducidos con cadenas hasta la Catedral y de allí a la Iglesia de las Santas Justa y Rufina para la solemne Misa conmemorativa.
Con ello, cada mes de julio, la ciudad oriolanas elige a los protagonistas que escenificarán el papel de auténticos héroes que forman parte de la historia de La Reconquista de Orihuela.
Este año, Juan Antonio Sánchez López (Seguidores de Arun y Ruidoms), representa la figura de embajador cristiano. Mientras que José Miguel Hernández Zaragoza (Moros Abdelazíes) ostenta el cargo de embajador moro. El alcaide del Castillo Festero es Marcelino Asuar Belda y la Armengola 2014, Almudena Meseguer Hernández. Como festeros de honor, los Moros y Cristianos destacan Sonia Soñer Montesinos, Gines Ruiz Crespo, José Germán Torres Saldaña, y Antonio Estañ Bonifaz.
Con estos representantes y la participación de 18 comparsas, arropadas por el calor de miles de visitantes, los oriolanos celebran como antesala del 772 aniversario de la conquista de la ciudad momentos de largo recorrido histórico. El desfile de Abanderadas, la procesión- traslado de las Santas Justa y Rufina desde su Iglesia Parroquial a la S.I. Catedral, donde tendrá lugar la ofrenda floral a las patronas.
También, la gran retreta festera y el gran desfile infantil son dos acontecimientos especialmente esperados por el pueblo oriolano.
Día grande
El 17 de julio es la fecha en la que la capital de la Vega Baja muestra todo su esplendor. Una jornada intensa dedicada a la historia, la leyenda, la fe... que comienza con la luz del día y acaba con la oscuridad de la noche. Todo comienza con el traslado de la Gloriosa Enseña del Oriol desde el Ayuntamiento a la Catedral. El símbolo de la victoria cristiana, popularmente conocido como «El Pájaro» recorrerá las calles de la ciudad en la procesión de las Santas Justa y Rufina. Un recorrido que tiene un respiro durante la celebración de la Solemne Misa de la Reconquista antes de volver a partir en el desfile con la presencia de todas las comparsas en pleno con vestimenta de media gala, presididas por la Armengola, Embajadores Cristiano y Moro y Junta Directiva Central.
La guerrilla única de pólvora Mora y Cristiana, la toma del castillo por el bando Moro con la representación del pacto de Teodomiro- que permitió a partir del siglo VIII la convivencia entre musulmanes y cristianos en Orihuela- y toma del castillo por el bando Cristiano anticiparán la retirada de la Gloriosa Enseña del Oriol del balcón principal de la Casa Consistorial.
Tras estos actos cargados de simbolismo, el bando de la media luna y el de la cruz alcanzarán el protagonismo de las fiestas en sus dos últimos días.
La puesta en escena de las dos huestes llenan la ciudad de majestuosidad, espectáculo y de fantasía entremezclada con el ritmo de las marchas festeras. Los días 18 y 19, se celebra las entradas cristiana y mora, respectivamente. Dos noches en las que los mejores trajes inspirados en las leyendas de tiempos remotos brillarán con luz propia en la ciudad que vió nacer al poeta Miguel Hernández.
La Armengola, cargo principal de la Reconquista al representar a la mujer de leyenda que ideó el exitoso plan para salvar a los cristianos de la invasión musulmana, será una de las figuras que acapare todas las miradas de los oriolanos. La admiración a esta personalidad es una muestra clara de la entrega del pueblo de Orihuela a sus fiestas.
