Así era Calp entre 1910 y 1912, poco antes de nacer el túnel. Casi una aldea de 2.480 almas (que aùn mermarían con una próxima emigración). También ambas torres, el campanario y la del Portalet desaparecerían al poco, dado su estado ruinoso. En la imagen, tomada desde la Ermita, sólo se reconoce la Casa Nova, una masía de finales del XVII o inicios dlel XVIII, propiedad de la terrateniente familia benissera de los Feliu. Los historiadores R. Llopis, T. Crespo y Joan B. Gandia las divulgaron en 2014 desde infobenissa.cat