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Respuesta a la carta

«Excelentísimo, reverendísimo, santísimo señor Pa:

Respuesta a la carta

Ante los acontecimientos que se están produciendo en este país antes llamado España, actualmente confederación ibérica de nacionalidades diversas, cantones variados y territorios mediopensionistas, me pongo en contacto con su reverenditud para exponerle el estado de la cuestión que tanto está dando que hablar aquí abajo y allá arriba: los políticos.

Por cierto, mi nombre es Mariano Rajoy, y soy el presidente más hiperactivo e innovador que ha tenido jamás este país.

Ya está bien, miren ustedes, de falacias y mentirijillas acerca de tan noble estamento, de personas abnegadas, obsesionadas con el servicio público y dispuestas a dejar brillantes futuros profesionales por un sueldo miserable y un plato de lentejas. A mi mente acuden los rostros de santos varones como González (Ignacio), Bárcenas (Luis), Granados (quizá Chupasangre?), Rato (mejor no me acuerdo). Pero para que no se interprete mi misiva como una opinión, vayamos a los datos concretos.

España, nuestra España, es campeona de Europa. Sí, ñoras y ñores, como lo oyen. CAMPEONES DE EUROPA. Como suena. En número de políticos.

¿Qué sucede? ¿No están contentos? Es que no puedo con los derrotismos.

Tenemos EL DOBLE de políticos que el segundo país con más políticos de Europa , que es Italia.

Resulta que tenemos 300.000 políticos más que Alemania (con la mitad de población) Y eso sí que tiene mérito. Tenemos 445.568 políticos. (Año 2.011)

Espectacular, están ustedes pensando. Pero vamos a gozar aún más:

En España hay 165.967 médicos, 154.000 policías, 19.854 bomberos

¡Resulta que hay más políticos que médicos, policías y bomberos? juntos!

Bueno, en estos momentos me imagino a todos ustedes saliendo en procesión a las calles para vitorearme. Pero paciencia, paciencia, que aun queda lo mejor.

Un maestro en España viene a cobrar 1.400 euros al mes por preparar a nuestros hijos para la vida. Un policía unos 1.600 euros por arriesgar su vida por todos nosotros. Un bombero, sobre 1.800. Y un médico, alrededor de 2.200 euros por mantenernos con vida.

Ahora? -atentos, que llega lo bueno- ¿Qué creéis que deberían cobrar los padres de la patria, esos próceres y próceras que no tiene horario, vacaciones, descanso, que se pasan el día apretando un botón y dormitando en una cosa llamada escaño, que debe ser incomodísimo? Pues sobre 6.000 de vellón. Y? jijijiji? con plan de pensiones aparte.

Quizá estéis pensando que hay un ligero desequilibrio, ligerísimo en todo caso. Pero veréis cómo os convenzo cuando os cuente los requisitos que han de cumplir para llegar a semejante tormento:

Para ser policía y bombero hay que tener el Bachillerato Superior y hacer una oposición. Para llegar a maestro necesitas Bachillerato Superior, título universitario (cuatro años) y una oposición. Médico: se exige Bachillerato Superior, la nota media más alta en la selectividad, título universitario (seis años), oposición a MIR, especialidad (obligatorio 4 años para medicina familiar, o cinco años el resto de especialidades) y oposición. Total once años en el mejor de los casos.

Y ahora viene lo mejor: Diputado: NINGÚN REQUERIMIENTO, ni titulación ni oposición, solo ha de ser mi amiguete o del tito Iglesias o de ese tal Sánchez.

Porque si hablamos de elección popular, con las listas cerradas, me entra la risa.

Amigos y amigas, esta es la realidad, de la que deberían ustedes estar orgullosos; repito: campeones de Europa. Y no hemos hablado de diputados autonómicos, locales, concejales, conselleres? Si añadimos asesores y enchufados varios, tengo la seguridad de que somos los campeones de la Vía Láctea y parte de Andrómeda.

Por eso os invito a hacer oídos sordos a estas majaderías que propugnan quitar las pagas vitalicias de tan insignes personajes, que paguen la seguridad social como todos -qué vulgaridad, por Dios-, que dejen de votar sus propios salarios o pagen su salud. Intoxicaciones interesadas de desestabilizadores y envidiosos.

Tanto es así que voy a proponer un plan, que modestamente voy a bautizar como el PFE: Plan para la Felicidad de los Españoles. Que consiste, nada más ni nada De nada, españoles, de nada!

MR»

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