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Juguemos a las adivinanzas

Juguemos a las adivinanzas

El mundo, la vida cambia sin cesar, y sin duda para mejor. Hoy los padres varones juegan más que nunca con sus hijos, y también han cambiado los juegos. Depende de la edad de los niños pero hay una tendencia a que cada vez más lo hagan con juguetes electrónicos: las consolas, wifis, etc.. y con ellos los que implican actividades deportivas. Se produce también una tendencia a que las pistolas o las muñecas no sean el juguete específico de los niños o las niñas. También es verdad que los juegos en mi época eran más sencillos, y sobre todo más baratos. Las niñas además de las cocinitas o a las muñecas jugaban al corro, a la comba o la rayuela, y los chicos a las chapas, el zurriago, el taco o los clavos, y ambos lo hacían al escondite, cuando podían nadaban en ríos o playas y caminaban por senderos en el monte. Aplaudo ahora y aquí a esos padres que, de forma magnifica, luchan con sus obligaciones para sacar tiempo con el que poder jugar con sus hijos, o a los abuelos, que disponen de más tiempo y que lo hacen.

Recuperar juegos antiguos. Les propongo dos divertimentos antiguos tranquilos, superbaratos, que ayudan a desarrollar la inteligencia de los pequeños y les permiten sonreír. Además hacen expandir su imaginación. Pero no lo dude, lo importante es que jueguen, ello les permite que tengan una infancia feliz y capten el amor que se les tiene.

El primero consiste en acertar adivinanzas. Les recuerdo algunas de ellas. Muchas se relacionan con animales, pero van de todo. Deben identificar qué es. Por ejemplo.

-¿Qué cosa es?: una señorita muy señoreada que siempre va en coche y siempre va mojada?

R: La lengua.

-¿De qué hay que llenar un cántaro para que pese menos que vacío.

R: De agujeros.

-Alto, alto como un pino y pesa menos de un comino.

Respuesta: El humo.

-¿Qué cosa es, que cuanto más grande menos se ve?

R: La oscuridad.

-¿Cuál es la única planta que no da flor ni fruto ni hoja.

R: La planta del pie.

Adivinanzas de animales

-¿Qué animal lleva todas las vocales encima?.

R: El murciélago.

-¿Cuál es el animal que tiene silla y no se puede sentar?

R: El caballo.

-Sobre la vaca va la O, ¿lo aciertas?

R: El bacalao.

-Desde hace muchos años hemos transportado a los hombres, ahora nos lleva él escondidos en el motor de su coche.

R: Los caballos.

-Jamás de su casa sale, pero corre el monte y el valle.

R: El caracol.

-Me llamo Leo, me apellido Pardo. Quien no me adivine es un poco lento.

R: El leopardo.

-Alto, altanero, gran caballero, gorro de grana, capa dorada y espuela de acero.

R: El gallo.

-Es un animal que tiene ojos de gato, orejas de gato, patas de gato y rabo de gato, pero no es un gato.

R: La gata.

-As no soy, as no fui, as no seré hasta el fin.

R.: El asno.

-¿Qué pasa si un elefante se queda parado sobre una pata?

R: Que el pato queda viudo.

-¿Cuál es el animal que muere entre aplausos?

R: El mosquito.

-Soy un animal muy elegante, muy veloz y poco fiero, y cuando quiero calzarme voy a casa del herrero.

R: El caballo.

-En alto vive, en alto mora, en alto teje la tejedora.

-R: La araña.

-Es del tamaño de una nuez, sube la cuesta y no tiene pies.

R: El caracol.

-Mi picadura es dañina, mi cuerpo insignificante, pero el néctar que doy lo coméis y os da placer al instante.

R: La abeja.

-No es león y tiene garra, no es el pato y tiene pata.

R: La garrapata.

-¿Qué es? Es de tamaño de una nuez, sube la cuesta y no tiene pies.

R: El caracol.

-No es león y tiene garra, no es el pato y tiene pata.

R: La garrapata.

Otras son adivinanzas de alimentos:

-Blanca por dentro, verde por fuera. Si no sabes que es, espera.

R: La pera

-Un ser gordito y coloradito. No toma café. Siempre toma te.

R: El tomate.

-Oro parece, plata no es, abran las cortinas y verán qué es.

R: El plátano.

-Lo come Pancracio, está en el champán. ¿Qué es?

R: El pan.

-Verde me crié, rubio me cortaron, y blanco me amasaron .

R: El pan.

-Blanco es, la gallina lo pone, con aceite se fríe y con pan se come.

R.: El huevo.

-Es ave y no vuela, y es llana pero mejor curva.

R: La avellana

Algunas son incluso cochinas, por lo que creo que es mejor que no las use. Un ejemplo sería:

-Entre dos piedras feroces sale un hombre dando voces.

Se refiere al ventoseo o el pedo, y las piedras serían los glúteos.

Otro juego sencillo y que mejora la atención y el vocabulario de los niños sería: el veo veo.

-Veo veo, ¿qué ves?, ¿con qué letrita empieza?

El mayor, el adulto, busca algo en el entorno y según se trate dice: con la S, R o la que sea.

Pero importa jugar. Una vez más le reitero que lo importante es jugar y demostrar a los niños que nos importan y se les quiere, ello se puede conseguir jugando con ellos.

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