Imaginemos el impacto que tendría en la sociedad el eliminar el error humano de la conducción, haciendo las carreteras mucho más seguras, a la vez que se descongestionan los, cada vez más abarrotados, núcleos urbanos. Pues bien, cada vez son más las empresas que quieren hacer realidad este bonito sueño que podría estar mucho más próximo de lo que imaginamos.
Todo empezó con Google
Si por algo se caracteriza la empresa de Mountain View es por su enorme afán de innovar y de hacer las cosas de forma diferente a los demás y eso hizo cuando mostró al mundo un pequeño coche capaz de recorrer una pista de obstáculos sin intervención humana. A partir de ahí el proyecto comenzó a tomar fuerza, hasta tal punto de que, en junio de 2011, el estado norteamericano de Nevada aprobó una ley que permitía la circulación de vehículos sin conductor, con el fin de que la empresa pudiese ponerlos a prueba en un entorno más complejo y realista.
El visionario Elon Musk
El gigante Tesla Motors es otro de los grandes de la ingeniería que está luchando por ganar esta partida y hay que reconocer que tiene los medios para ello: construyeron el primer coche eléctrico, de uso habitual y, más recientemente, otra de las empresas de Musk, SpaceX, logró enviar el primer cohete capaz de regresar intacto a la Tierra, para ser reutilizado en próximas misiones.
El coche «indie» de Hotz
Quizás el caso más curioso hasta la fecha es el de George Hotz, un hacker de 26 años conocido por haber sido la primera persona en hacer jailbreak al iPhone y también a la Play Station 3. Tras haber trabajado, brevemente en empresas como: Google, SpaceX o Facebook, el joven ha decidido construir en el garaje de su casa un vehículo autónomo mejor que el de Tesla, según sus propias palabras, algo a lo que muchos, incluido el propio Elon Musk son bastante escépticos.
El nuevo modelo de Uber
En septiembre de este año, el CEO de Uber, Travis Kalanick, afirmó que los vehículos sin conductor formarían parte de los planes de futuro de su compañía, al ofrecer una mayor seguridad para los pasajeros, así como una mejor forma de gestionar el tráfico de las grandes ciudades.
El futuro
Además de las ya citadas, empresas como Apple o Mercedes Benz también trabajan en este campo que tendría infinidad de ventajas al permitir que todo el mundo pudiese «conducir» en un momento dado: niños, enfermos, invidentes o cualquier otra persona que en condiciones normales no pudiese ponerse al volante, sería capaz de ir de un lugar a otro de forma segura gracias a esta nueva tecnología que algunos ya esperamos con impaciencia y curiosidad.
