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Expertos en dilatar los procedimientos

El juez Gómez Bermúdez ha tardado poco más de dos años y medio en cerrar la investigación de la causa principal de la CAM, lo que se puede considerar todo un récord viendo la evolución de la mayoría del resto de piezas que investigan la debacle de las cajas españolas. En gran medida estos dilatados plazos son obra de la pericia de los abogados defensores, «auténticos expertos en hacer todo lo posible para retrasar la instrucción», según explica el letrado que representa a la asociación Apabankval, Diego Muñoz, que se tiene que ver las caras con ellos en las múltiples pieza que se instruyen sobre el Banco de Valencia.

Otro problema es la sobrecarga de trabajo que acumulan los juzgados y, en concreto, en la mayoría de los casos relacionados con las cajas de ahorros, la Audiencia Nacional.

«El problema es que la Audiencia también se encarga de los casos de terrorismo o los de yihadismo y todas las grandes causas, con lo que no siempre pueden atender a aquellas que no se consideran tan urgentes», se lamenta Muñoz. También depende de la complejidad de la pieza, que en el caso del sector financiero y mercantil suele ser elevada.

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