Los fondos del Archivo son accesibles en las instalaciones y a través de la página digital del mismo donde cientos de profesores, estudiantes y ciudadanos de Alicante y del resto de España consultan los documentos, como refleja la breve Memoria que se realiza en un acto público de carácter anual por la conmemoración del Día de la Constitución Española de 1978.

Sin embargo, según el propio Perea, a pesar de la libertad conseguida a partir de la consolidación democrática, «todavía hay archivos que no están fácilmente accesibles o que los organismos que los conservan carecen de medios para facilitar su consulta y el trabajo de los investigadores». Una lucha activa del Archivo ha sido superar estas trabas y conseguir que todos los ciudadanos puedan acceder a los documentos que conforman su historia.

La plantilla profesional del Archivo es mínima y, por ello, Perea manifiesta que se ha tenido que suplir con «becas de estudiantes colaboradores». Sin embargo, desde hace unos meses, la Generalitat se ha implicado en la recuperación de la memoria con la creación de una cátedra interuniversitaria, actualmente dirigida por el profesor José Miguel Santacreu Soler, de la Universidad de Alicante. «Esperamos que, en la medida que esta implicación del gobierno valenciano se consolide, iniciativas como la del Archivo de la Democracia puedan recibir nuevos impulsos».

Perea reconoce algunas lagunas dentro de los fondos -sobre todo en lo concerniente a algunos partidos, sindicatos o colectivos sociales-, pero el material del Archivo pretende dar respuesta a esos años tan importantes y complejos. «Todavía es necesario ampliar dichos fondos, especialmente la documentación de partidos del centro y la derecha», afirma Perea. Sin embargo, en opinión del Consejo, «lo que existe es desconocimiento de la labor del Archivo y de la seriedad con que son tratadas las donaciones». Quizá ahí respira la importancia de conocer su labor y apoyarla, colaborando activamente en recuperar la memoria de nuestra ciudad.