En las últimas semanas Igor Fraga ha grabado el último álbum de Monserrat y ha participado en los nuevos proyectos musicales de Henry Saiz, además de estar implicado en obras teatrales o anuncios promocionales para grandes marcas
La polifacética y consolidada carrera de Fraga en el mundo de la música, tanto como compositor, guitarra y voz, así como productor, arreglista y técnico de sonido, le ha permitido granjearse un sinfín de habilidades, conocimientos, recursos y red de contactos que encuentra su sentido en la labor que realiza en Alicante desde La Charnicería. «Con todo lo que aprendí del oficio con el proyecto de Little Fish lo consideraría un desperdicio si no lo compartiera», apunta Igor Fraga. Un motivo por el cual considera La Charnicería una consecuencia directa de Little Fish.
Tanto es así que proclama: «Todo esto ya me ha pasado», desde su página oficial en Facebook. Y es que desde 1993, fecha en la que empezó a trabajar como Little Fish se dedicó a hacer sus discos, los de mucha gente, y haciendo además fotos, videoclips, estudios de grabación, buscando conciertos, haciendo carteles, promoción, grabando como músico, como productor, como técnico y como arreglista, sonorizando directos, tocando varios instrumentos? Así, la experiencia de Igor Fraga ha ido sumando enteros hasta convertirse en lo que podría ser un ángel de la guarda que puede conjugar los elementos que son necesarios para que el disco que tienes en la cabeza se escuche de la mejor manera, gracias a sus amplios conocimientos técnicos y de producción para grupos de música.
Su trabajo, señala, es «grabar», fundamentalmente. Pero La Charnicería es mucho más. Ser músico es su valor añadido. Desde pequeño, estudió música, solfeo, acordeón y estuvo cantando en coros hasta los 18 y todo su bagaje con Little Fish, entre otros proyectos como por ejemplo The Grave Yach Club, construye una trayectoria gracias a la cual los artistas sienten esa complicidad y confianza cuando el sonido está en sus manos. Y así se plasma en la atmósfera del estudio y en el resultado de la grabación.
Se veía venir que con el gusto vintagero de Igor Fraga, que tiene en su haber multitud de «cacharros», iba a conectar con la creatividad de Henry Saiz, otro artista multidisciplinar (Dj, productor, fundador del sello Natura Sonoris, conductor de un programa de radio?), que también siente predilección por los sonidos analógicos. Con el artista madrileño ha trabajado como técnico para el álbum Calor, que recientemente ha publicado bajo su segundo alias: Hal Incandenza. Una labor que realizó en el estudio alicantino Sacramento, centrándose sobretodo en voces, saxofones, guitarras?y del que ya está en marcha la edición en vinilo. A partir de esto, siguieron en contacto y ha participado en parte de la grabación del nuevo macroproyecto de Henry Saiz Band, que también incluirá película, y que la banda ha ido filmando y grabando por todo el mundo. Un ambicioso nuevo trabajo, que se financia gracias a una campaña desplegada en Kickstarter, y en el que Igor Fraga ha estado implicado en la parte que se ha grabado en el estudio Tigruss que está ubicado en la localidad de Dénia.
No sabe estar de brazos cruzados. De hecho, le encontramos trabajando en plena gira de presentación del Low Festival como técnico para el grupo Samonik. Y a todo proyecto destina la misma pasión y compromiso. Este 2017, una de sus motivaciones es volver a poner en circulación a Little Fish. El año pasado, comenta, «se cumplieron 20 años desde el último disco». Y ahora, se ha juntado con Chuso, de Cachorro (guitarra), Marcos, de Flyingpingmatanza (batería) y Javi, de Monserrat (bajo). Una sólida unión entre grandes músicos y compositores con los que proyecta ya hacer un bolo de cara a este otoño para interpretar canciones de la etapa anterior y también nuevas.
Aunque Igor Fraga alaba la escena actual de bandas en Alicante y que haya más sitios donde tocar (la renovada 8 1/2, la sala Stereo, Las Cigarreras?), cree que «falta respuesta por parte de la gente y apoyo institucional» para que ese buen estado de forma se traduzca en más discos y directos de todos los artistas que hay a un gran nivel a lo largo y ancho de la provincia.
Y no sólo a proyectos musicales se dedica desde La Charnicería. Igual que realizó el vídeo para Amaro Bikes que tan buena acogida ha tenido, ahora está volcado con una compañía de teatro amateur de Mutxamel (Cinética) para la que realiza el diseño de luces y sonido y compone las bandas sonoras; está haciendo los arreglos musicales para un disco-libro de nanas o campañas más publicitarias como vídeos para Instagram o animaciones de logos. Por todo esto?¡por 15 años más!
