Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Los orígenes del cuarto género

Esta antología del microrrelato español comprende desde el modernismo hasta las vanguardias con 39 textos de 14 autores

La editorial palentina Menoscuarto ha publicado una muestra representativa de los orígenes del microrrelato español, también conocido como el cuarto género, datados entre 1892 y 1939, entre la llegada del Arte Nuevo, que agitó el interés por la semblanza y el aforismo, y la derrota de la Segunda República, es decir, desde el modernismo hasta las vanguardias. No obstante, la nueva distancia narrativa de concisión textual no adquirió conciencia de sí misma hasta la década de 1980.

El editor Darío Hernández resume su tesis doctoral en este libro, que aglutina 39 textos (con inevitables dosis de surrealismo y de lirismo) de 14 autores dispares entre sí, entre los que destacan Juan Ramón Jiménez y Ramón Gómez de la Serna (el mayor productor contemporáneo de formas neológicas). El resto de la nómina lo completan el transgresor Benjamín Jarnés, Jorge Guillén, esa frustrada promesa vanguardista heredera de Larra que fue Antonio Espina, el creador de la expresión «España peregrina» José Bergamín, el fundador de La Gaceta Literaria Ernesto Giménez Caballero, el mitificado Luis Buñuel, el comediógrafo de espíritu heterodoxo Enrique Jardiel Poncela, el valenciano Samuel Ros Pardo, el malacitano José María Hinojosa y Francisco Ayala con su mirada crítica y sarcástica. En este listado hay autores de trayectorias engarzadas, ya que Gómez de la Serna influyó tanto en Bergamín como en el vanguardista metafórico Ros, al igual que en Buñuel (quien desarrolló su producción literaria hasta su tercer filme Las Hurdes), mientras que Juan Ramón Jiménez hizo lo propio en la obra tanto de Moreno Villa como de Hinojosa, a quien definió como «vívido, gráfico poeta agreste».

Surrealismo y lirismo

En cuanto a los textos hiperbreves seleccionados, si bien Gómez de la Serna recurre a temas habituales como la fantasía, el humor y la intertextualidad, sin olvidar los rasgos innovadores y transgresores, Jarnés integra diferentes microtextos para crear sus cuentos fractales Folletín y Película. Por su parte, García Lorca conserva su simbolismo y la combinación de tradición y vanguardia en los textos seleccionados, mientras que Buñuel da rienda suelta al surrealismo en Olor de santidad y Espina trasplanta el «realismo incorpóreo del cinema» en Manola. Se echa de menos algún texto más de Jardiel Poncela y la introducción resulta corta, aunque la antología funciona bien como un termómetro de la temperatura del microrrelato de una época, como un panorama de aquella estética predominante que enriquece un poco más al lector.

Lo último en INF+

Compartir el artículo

stats