«Once temas con una duración total de unos cuarenta y cinco intensos minutos para que os quepa en una cara de un cassettede 90», anunciaban a sus mecenas estas últimas semanas desde el proyecto que lanzaron en Verkami para recaudar fondos vía crowdfunding y así poder financiar la finalización del álbum. El dinero recaudado en la campaña irá destinado a parte de la mezcla y producción, mastering, que correrá a cargo de Metromastering (A Coruña), edición y distribución del disco. Para la grabación, han vuelto a confiar en Studio Cúbico y señalan que ha sido un proceso que iniciaron el pasado mes de noviembre y que se ha alargado tanto porque iban «de domingo a domingo#
Nacida en 2012 en formato dúo, con la publicación ese mismo año de un EP homónimo, el grupo alicantino formado por Beatriz Rico (guitarras y voces), Noelia Meseguer (guitarras y voces), Sergio Prieto (batería y percusiones) y Joan Lorenzo (bajo), que en el anterior álbum (Draco) ofrecía un sonido folk, vuelven a la carga con un disco en el que han crecido como banda.
De los once temas que forman el disco, han compartido desde su bandcamp dos primeras canciones (Tucumán y Protegidos) que vuelven a envolvernos gracias a las melodías creadas por Beatriz Rico y Noelia Meseguer. La manera de entremezclar sus voces es la mejor carta de presentación de Baralides, pero esta vez sorprenden al componer todas las canciones en castellano y al echar la mirada atrás de forma inconsciente a referencias musicales de la etapa de Pili Perkins.
El disco es más movido. Rock noventero. Tal y como reconocen, han vuelto un poco a lo que eran antes. «Hay canciones que me recuerdan a esa época. Ha salido así. Noelia y yo estábamos en Pily Perkins y somos las que componemos así que?ahí se tiene que notar, tiene que salir. No de forma intencionada. Evolucionamos simplemente, de forma muy abierta, sin planteamiento inicial», apunta Beatriz Rico. Después de sacar en Draco una canción en castellano (Di adiós), recuerda, no pudieron volver al inglés. Hubo un antes y un después.
Eso sí, no pierden su esencia inicial. Ofrecen un sonido más rockero y bailable que se anticipa por ejemplo en la canción Protegidos, que ya tocaron en aquel directo de hace un par de años en el Low Festival de Benidorm. Las canciones las escuchas, señala Joan Lorenzo, «y suenan muy frescas. De hecho, últimamente, escuchando los dos discos, me da la sensación de que este suena con más brillo. Es otro sonido diferente». Con Tucumán, titulada así por la calle alicantina, nos encontramos con una de las colaboraciones con las que cuenta el disco: David Esteve a la trompeta, la única experimentación del nuevo álbum ya que, a nivel de género musical, no han echado mano de nada diferente. «Nos movemos en el ámbito en el que nos sentimos cómodos», declaran desde Baralides.
En este sentido, apunta Beatriz Rico, «es una tradición lo de las colaboraciones. Siempre vienen Héctor Bardisa (percusiones y guitarras) y José Antonio López (guitarras) a grabar algo». En cuanto al idioma, hay varios proyectos musicales que le inspiran. Le viene a la memoria lo nuevo de su amigo Santi Campos, Cojones, un álbum que se publicó finalmente el pasado mes de abril de 2016; o referencias como Coque Malla o Nudozurdo.
A nivel de diseño, también es Beatriz Rico la que está detrás del collage que será portada del disco. Estaban atascados con ese tema y, mira por dónde, empezó en su casa a recortar y experimentar con un libro. Y pensó «¿y si hacemos algo así? Y al final se quedó». La contraportada es obra de Noelia Meseguer, que también la hizo recortando y ahora les queda lo de dentro para completar el diseño de Mira qué bien, el nuevo álbum que, si todo marcha según calculan, saldrá una vez pase este verano.
