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Un ensayo para disfrutar aprendiendo

José Ramón Alonso presenta un libro riguroso y ameno acerca del cerebro y el sistema nervioso

En octubre de 2011, reseñé La nariz de Charles Darwin y otras historias de la Neurociencia (Premio Prisma al mejor libro de divulgación científica editado en ese año). En esta ocasión, quiero comentarles otro ensayo fascinante: El escritor que no sabía leer (Premio Prisma al mejor texto original inédito). En él, José Ramón Alonso pretende enseñar, divertir, captar nuestra atención y nuestro interés por la Neurociencia y, como en su anterior trabajo, logra sus objetivos, deleitándonos.

Con un título sugerente y un índice atractivo, los treinta y ocho relatos breves sobre la maravilla de nuestro cerebro y su complejo funcionamiento nos atrapan desde el inicio; porque Alonso tiene la habilidad de seducir contando historias. Así, leemos multitud de capítulos estimulantes como La piedra de la locura, donde analiza cuatro obras pictóricas sobre la trepanación; otro dedicado a las fobias y a personas famosas que las padecen; apartados sobre la memoria como Pequeños olvidadizos, H.M.(Henry Molaison, el paciente más famoso del siglo XX), o El límite cerebral de Facebook; como era de esperar, hay un episodio destinado a resolver la intriga producida por el título de la obra. También obtenemos la respuesta al denominado Problema de Molyneux, 323 años después de que este formulara la inquietante pregunta: si una persona ciega de nacimiento consiguiera ver, ¿reconocería mediante la visión un objeto que antes solo había conocido por el tacto?

Además, el autor critica la excesiva confianza en los genes, cuyo peso sobre el desarrollo de la persona es importante, pero limitado; examina el cerebro de los castrati; nos sorprende con las lobotomías realizadas a Rosemary (la hermana de J. F. Kennedy) y a Eva Perón, con los vínculos establecidos entre Los viajes de Gulliver y la Neurociencia, con la relación entre la estructura del cráneo de los pájaros carpinteros y las mejoras en los cascos de los motoristas... con interesantes narraciones sobre cine, literatura, música.

José Ramón Alonso sabe combinar rigor científico y amenidad, investigación y vida cotidiana; lo manifiesta de forma elegante en El escritor que no sabía leer. ¡No se la pierdan! ¡La disfrutarán! Por nuestra parte, seguiremos siéndole fiel con la lectura del tentador Neurozapping. Aprende sobre el cerebro viendo series de televisión.

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