Agentes de la Guardia Civil de Alicante, en colaboración con la Benemérita de Madrid y la Policía italiana y en coordinación con el juzgado de Instrucción número 1 de Torrevieja, han desarticulado la mayor banda organizada dedicada al robo con violencia e intimidación en entidades bancarias de España. Según la Guardia Civil, a los integrantes de este grupo, formado por once personas de nacionalidad italiana, belga y española, se les considera autores de 34 robos con violencia e intimidación en bancos y cajas de ahorro de Granada, Málaga, Murcia, Cuenca, Madrid, Burgos y Alicante.
El botín conseguido en todos estos atracos, que fueron cometidos entre abril de 2006 y marzo de 2007, ascendió a unos 750.000 euros, según la información facilitada ayer por la Benemérita. De los 34 asaltos, cuatro fueron cometidos en la provincia de Alicante.
El reciente arresto de dos personas en la localidad italiana de Nápoles, otras dos en Málaga y otra en la prisión italiana de San Remo ha permitido el desmantelamiento de este grupo organizado, integrado por nueve personas de nacionalidad italiana, una belga y una española.
La utilización de armas blancas en los atracos a las entidades bancarias españolas puso en alerta a la Guardia Civil de que sus autores podrían ser de origen napolitano, característica común de los delincuentes de esta zona italiana. Los primeros datos permitieron comprobar que el grupo investigado y ahora desarticulado tenía su residencia en Marbella (Málaga);, ciudad con una amplia colonia de ciudadanos italianos originarios de la ciudad de Nápoles.
Desde la ciudad andaluza se desplazaban a otras provincias para cometer los hechos delictivos y utilizaban documentaciones falsas para alojarse en hoteles y alquilar vehículos de alta gama. Posteriormente, la Guardia Civil comprobó que este grupo estaba relacionado con otro, ubicado también en Marbella, dedicado al tráfico de estupefacientes a gran escala, y cuyo dirigente era un jefe de la camorra napolitana del "clan de los Mazarella", quien fue detenido en julio de 2007 en la operación "Tizona".
La operación de la Guardia Civil, denominada "Piper-Gorra", se inició en enero de 2007 con la detención en Madrid de un español de 45 años y de uno de los italianos cuando se disponían a robar en un banco. Meses después, los agentes arrestaron a otros dos italianos cuando perpetraban un robo en un banco de Ciudad Quesada, en Rojales, para posteriormente detener a un ciudadano belga de 64 años como cómplice. Con el intercambio de información entre la Guardia Civil y la Policía napolitana, se logró identificar a tres atracadores en Nápoles y detener a dos de ellos. En Málaga arrestaron a otros dos y ahora comprobaron que el último integrante, identificado como G.M., de 57 años, había ingresado en la prisión de San Remo (Italia); por otros delitos.
