El magistrado titular del juzgado de Instrucción número 4 de Alicante acordó ayer ampliar el alejamiento del padre del presunto asesino de la hija de su vecina al resto de familiares de la víctima, en concreto al marido y a los hijos de África. La medida se acordó ayer a petición de la acusación particular ejercida por la familia de África en una comparecencia realizada en el juzgado conforme a la ley del jurado y para ratificar o no la prisión del acusado, acordada por el juzgado de guardia el pasado 30 de marzo.

Este alejamiento de 500 metros de distancia se acordó inicialmente sólo respecto de la madre de África, por lo que el padre del presunto asesino, de 75 años, tuvo que abandonar su domicilio y alojarse en casa de un familiar.

El juez instructor no sólo amplió ayer la orden de alejamiento al padre, sino que ratificó la prisión del acusado después de que tanto la Fiscalía como la acusación particular solicitaran su imputación por un delito de asesinato con alevosía. Respecto al padre pidieron su imputación por amenazas, aunque la acusación particular las ha calificado como más graves y pidió incluso que se acordara su ingreso en prisión, aunque no lo acordó el juez. Por su parte, la defensa solicitó el sobreseimiento tanto para el padre, que niega haber amenazado a la madre de la víctima, como para el hijo. En este sentido, el juzgado ha solicitado que el acusado sea examinado por dos forenses con el fin de determinar su imputabilidad o no. Además ha pedido a la Unidad de Conductas Adictivas que remita un informe de la psiquiatra que ha estado atendiendo al ahora encarcelado por el crimen.

Trasladado desde Fontcalent

El acusado fue trasladado ayer desde la prisión de Fontcalent hasta los juzgados de Benalúa para la comparecencia, mientras que su padre también acudió y aunque no prestó declaración sí tuvo un turno de palabra en el que negó las amenazas a la madre de la víctima y relató los problemas de adicción de su hijo desde muy joven, situación agravada desde hace un año tras la muerte de su madre. Asimismo, indicó que el día de los hechos su hijo subió a su casa y le dijo: «Te he buscado la ruina». Fue entonces cuando bajó con él al portal donde fue apuñalada África en repetidas ocasiones. El hijo fue más escueto en su intervención en el juzgado y aseguró que no recordaba nada.

El informe de autopsia revela bastantes más puñaladas de las que se barajaron en un principio. Así, los forenses han localizado hasta 68 heridas inciso punzantes en diferentes partes del cuerpo. Una de estas puñaladas le perforó un pulmón causándole un hemotórax y el fallecimiento fue debido a una hemorragia aguda que causó un shock hipovolémico por las numerosas cuchilladas.

Además de los estudios médicos sobre la posible inimputabilidad del investigado, el juzgado tiene previsto tomar declaración sobre lo ocurrido a la madre de África, quien la acompañaba cuando ambas salieron del ascensor para irse a comer por su 92 cumpleaños y el hijo de su vecino atacó a su hija en el portal.