La titular del juzgado de instrucción 1 de Manacor imputa un presunto delito de homicidio al anciano que el pasado 24 de febrero causó la muerte de un joven de 25 añosmuerte de un joven de 25 años al que disparó con una escopeta de caza durante el asalto a su casa de campo en Porreres con el propósito de robarle.

La jueza ha tomado declaración esta mañana al hombre, de 77 años, para quien ha decretado libertad provisional con cargos, según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de Baleares (TSJIB).

El investigado disparó en el abdomen sobre uno de los cuatro hombres que había entrado a robar a la vivienda en la estaba junto a su esposa, un asalto por el que están en prisión un hermano gemelo del fallecido y otros dos presuntos ladrones, de 44 y 58 años.

El imputado por homicidio, que ha acudido hoy a los juzgados de Manacor acompañado de su esposa, también sufrió heridas en el enfrentamiento con los ladrones, que ya habían robado en la casa en una ocasión anterior.

Hace unas semanas, Pau Rigo participó el pasado 23 de marzo, en compañía de la comisión judicial, en la reconstrucción del atraco en su chalé del Camí de s'Olivar de Porreres que sufrió el 24 de febrero. También acudió Freddy E.B., de 25 años, uno de los asaltantes. Su hermano gemelo Mauricio falleció al recibir un disparo de escopeta del anciano durante el asalto.

Versiones contradictorias

Las versiones de lo ocurrido aquel 24 de febrero que han ofrecido los tres implicados -el anciano, su mujer y el hermano del fallecido, encarcelado por su participación en el asalto- son contradictorias y confusas. Pau Rigo ha explicado que, en un descuido de los ladrones, logró hacerse con una de sus escopetas. Estaba cargada desde que semanas atrás sufrió otro violento robo en su casa, que no denunció pese a que los asaltantes se llevaron unos 35.000 euros. Según el anciano, Mauricio E.B. se abalanzaba sobre él con una pata de cabra en la mano y él apretó el gatillo para evitar que lo golpeara. Los dos intrusos le habían propinado ya una paliza para que les entregara todo el dinero que hubiera en la casa y también habían golpeado a su mujer.

El hermano del fallecido, Freddy E.B., sostiene que cuando tiroteó a su hermano el anciano no estaba siendo agredido. El joven asegura que lograron hacerse con un botín de 12.000 euros y cuando pidieron más a Pau R., este les llevó a un sótano para dárselo. Fue al salir de esa estancia cuando se toparon de frente con el anciano armado. "¡Os mato!", gritó antes de disparar a Mauricio. El hombre habría intentado entonces recargar el arma, ante lo que Freddy se lanzó contra él y hubo un intenso forcejeo. Según su declaración, la paliza que recibió el anciano fue posterior al disparo contra su hermano. La inspección ocular llevada a cabo por la Guardia Civil avaló esta versión.

La mujer de Pau Rigo no presenció la escena, ya que se encontraba en otra estancia de la vivienda. En su declaraciones ante los investigadores de la Guardia Civil, aseguró haber escuchado primero un disparo y luego a su marido gritar de dolor.