El Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil de Alicante ha investigado a una joven de 29 años vecina de Orihuela como presunta autora de delitos de falsedad e intrusismo profesional al vender a través de internet perros con cartillas sanitarias fraudulentas.

La investigación se inició tras detectarse irregularidades en varias cartillas veterinarias de perros que fueron llevados a clínicas de Orihuela y Santomera. Todos los animales procedían de la provincia de Alicante y tenían una cartilla donde constaba el pedigrí y diversas vacunas y desparasitaciones. Según la Guardia Civil, las cartillas no tenía el formato oficial de la Generalitat y los datos de las vacunas tampoco tenían el sello, firma y número de colegiado del veterinario que supuestamente se las puso a los canes.

Los agentes averiguaron que los dueños de los perros con cartillas falsas habían comprado los animales a través de internet, por lo que continuaron con las pesquisas hasta que identificaron a una joven de 29 años que podría llevar al menos seis años vendiendo perros y gatos de diferentes razas. En el caso investigado se trata de dos cachorros de raza chihuahua que los entregó a los compradores con una cartilla que no era oficial y tenía le pegatina de la vacuna sin constar los datos del veterinario.

En otra intervención del Seprona, una patrulla de Xixona incautó 15 ejemplares de tortuga mora en un domicilio de El Campello. El dueño, un hombre de 58 años, carecía de documentación que acreditara el origen lícito de las tortugas, por lo que al tener una especie con especial protección fue investigado por un delito relativo a la protección de la flora y fauna.

Por otro lado, el Seprona de Elche levantó un acta a tres cazadores por cazar fuera de los horarios permitidos en un coto de aves acuáticas de los parques naturales de Santa Pola y El Hondo. Los agentes les intervinieron 11 ejemplares adultos de pato cuchara que el Seprona entregó en una residencia de ancianos de Elche.