Un bar del centro de Alicante fue víctima en apenas un mes de tres robos, uno de ellos a punta de pistola, y los autores fueron las mismas personas, dos hombres de 33 y 45 años que fueron detenidos tras ser sorprendidos «in fraganti» por agentes de la Brigada de Seguridad Ciudadana cuando cometían el último asalto. Tras su detención los investigadores de la Brigada de Policía Judicial han logrado esclarecer que estos arrestados presuntamente cometieron también los otros dos robos.
El calvario del dueño del establecimiento, un bar de la calle Segura, comenzó la pasada noche de Reyes. El trabajador del establecimiento estaba cerrando el local cuando irrumpieron dos encapuchados portando una pistola y le encañonaron. La víctima fue obligada a introducirse en el almacén y los asaltantes se apoderaron a continuación del dinero de la recaudación de la caja registradora y de las máquinas tragaperras, así como un teléfono móvil de alta gama.
El botín se acercó a los 2.000 euros y los atracadores se llevaron además las llaves del bar junto con el mando para abrir la persiana automática del establecimiento. Por ello, el dueño del bar decidió instalar cámaras de vídeovigilancia como medida de seguridad ante nuevos robos. Y no tuvo suerte. Dos semanas más tarde los mismos ladrones, que ocultaban sus rostros parcialmente con capuchas y bragas de cuello, accedieron al bar cuando estaba cerrado con la ayuda del mando de la persiana y volvieron a sustraer el dinero de la caja registradora y el de la máquinas tragaperras.
La suerte ya le sonrió en el tercer robo, ocurrido la madrugada del pasado 6 de febrero. El dueño descubrió a los ladrones gracias a las cámaras de seguridad y avisó a la sala operativa del 091, que envió a una patrulla de servicio y gracias a la rapidez con la que se personaron en el bar pudieron sorprender dentro a los autores de los robos, que estaban forzando de nuevo las máquinas tragaperras.
Tras esta detención la Policía logró vincularlos con los dos robos anteriores y en un registro domiciliario intervinieron prendas usadas en los asaltos, así como una pistola detonadora que usaron para intimidar a la víctima en el primer robo. Los dos arrestados pasaron a disposición judicial y se acordó el ingreso en prisión de uno de ellos al constarle numerosos antecedentes por hechos similares.
