Pleno de seis delitos. Un joven de 27 años fue detenido en El Campello por seccionarle un tendón de un dedo a un conductor con una sierra tras una discusión de tráfico y la Guardia Civil le acusó de los delitos de lesiones graves, amenazas a agentes de la autoridad, daños intencionados en vehículo, conducir un vehículo a motor careciendo de permiso, negativa a someterse a las pruebas de detección de alcohol y drogas y robo con fuerza en una finca agrícola, según informó ayer la Comandancia de Alicante. Por si fueran pocas infracciones, dos días antes ya había sido detenido por quebrantar una orden de alejamiento al haber amenazado a un vecino con una barra de hierro.

Tras ser puesto a disposición judicial el joven conductor quedó en libertad provisional, aunque el juzgado acordó una orden de alejamiento de la persona agredida con la sierra. La Guardia Civil le intervino dos bastones punzantes, un cuchillo, unas tijeras y cuatro sierras.

La agresión se produjo a raíz de un accidente de tráfico ocurrido en El Campello, donde se vieron involucrados dos vehículos. Según la Guardia Civil, uno de los conductores se bajó de su vehículo y comenzó a golpear el otro, pero no debió parecerle suficiente y regresó a su furgoneta para coger una sierra. Volvió al otro vehículo y agredió con una sierra al otro conductor. Le causó un corte del tendón de un dedo de la mano y tras la violenta reacción se dio a la fuga.

La Guardia Civil recabó datos de testigos del suceso e identificó rápidamente al autor de la agresión, un joven que ya había sido detenido dos días antes por quebrantar una orden de alejamiento de un hombre al que amenazó con una barra de hierro y por un delito contra la seguridad en el tráfico por conducir una furgoneta careciendo de cualquier tipo de permiso.

Agresividad

Al saber que se trataba de esta persona y que era un peligro potencial por su gran agresividad la Guardia Civil estableció un dispositivo de búsqueda que permitió localizarle ese mismo día. Cuando le vieron el fugado seguía conduciendo la furgoneta implicada en el accidente y cuando los agentes procedieron a detenerle comprobaron que su grado de agresividad no había disminuido. De hecho, amenazó de muerte a los agentes, a los que profirió todo tipo de insultos. Además se negó a realizar la prueba de alcoholemia y drogas que los agentes decidieron llevar a cabo debido al estado de alteración que presentaba.

Los agentes cachearon al detenido y descubrieron que llevaba unas tijeras escondidas en la pernera del pantalón. Además llevaba en el vehículo dos bastones punzantes, un cuchillo y tres sierras, aunque ninguna era la usada en la agresión al conductor.

Por ello, la Guardia Civil solicitó una autorización judicial para buscar la sierra en su domicilio y allí la encontraron con restos de sangre.

Aún se llevaron otra sorpresa en el registro al encontrar 21 paletas valorados en 1.470 euros y que fueron robados hace unos meses en una finca agrícola.