Susto tremendo el que se llevaron un padre y su hijo en la noche del viernes en su chalé en Alicante, donde fueron maniatados y amordazados mientras desvalijaban su vivienda. Una banda de ladrones se presentó en la puerta de la casa, en la Playa de San Juan, armados con una escopeta recortada y con chalecos de la Guardia Civil, y se llevaron los objetos de valor tras fingir que iba a realizar un registro del chalé, según informaron fuentes cercanas a la investigación, de la que se ha hecho cargo la Policía Nacional para esclarecer los hechos y dar con los asaltantes.

El robo se registró sobre las 22.30 horas en una vivienda de la calle Enric Valor, entre las avenidas Miriam Blasco y Locutor Vicente Hipólito, muy cerca del Parque de Bomberos. Entre cuatro y cinco hombres con pasamontañas y chalecos de la Benemérita se personaron en esta casa, llamaron a la puerta, se identificaron como agentes de la Guardia Civil y dijeron que tenían que realizar un registro de la vivienda.

En ese momento se encontraban allí un padre y su hijo, que no tuvieron más remedio que permitir la entrada en la casa de los supuestos agentes, que una vez dentro procedieron a amordazar y maniatar a los moradores para desvalijar el chalé, evidenciando que se trataba de un robo y que no se trataban de agentes de la Ley.

Los residentes colaboraron con los asaltantes, que les amenazaron con una escopeta de cañones recortados que se desconoce si era auténtica, estaba inutilizada o era falsa. Los ladrones, que se comunicaban mediante «walkie-talkie» dentro de la propia vivienda mientras la registraban, iban con las caras tapadas, y eran cuatro o cinco, según el testimonio relatado por las víctimas a la Policía Nacional.

Botín

En cuanto al botín obtenido por los delincuentes, se desconoce la cuantía, aunque se llevaron los efectos de valor y los teléfonos móviles, para así también dificultar que pudieran llamar a las autoridades y facilitar así su huida. Las dos víctimas resultaron ilesas.

Este robo con violencia se une al registrado una semana antes en San Vicente del Raspeig, donde una banda asaltó un chalé de Villamontes a punta de pistola y agredió a un empresario para robar dinero y joyas. La víctima estaba con su mujer, su consuegra y su nieta de 3 años cuando en la tarde del sábado 27 de enero entraron los cuatro encapuchados.