? El presunto cerebro de este entramado de estafas, Jesús Fernández Utrera, apareció asesinado en el año 2011 en una casa abandonada del Maigmó en el término municipal de Tibi. Unos niños que paseaban con los perros por la zona encontraron los restos óseos del hombre que llevaba desaparecido desde 2008, momento en que pudo cometerse el crimen. En el año 2015, la Guardia Civil practicó dos detenciones por el crimen, que aún no se ha juzgado. La investigación apuntaba a que Utrera invirtió el dinero obtenido en sus estafas en drogas y pudo ser víctima de un ajuste de cuentas entre narcos.