La Audiencia Provincial ha condenado a dos años y nueve meses de prisión al excontable de una empresa de Alicante por estafar cerca de cien mil euros a la mercantil para la que trabajaba y a otra persona a la que gestionaba su patrimonio personal y profesional, según se recoge en una sentencia.

El fallo declara como hechos probados que el acusado trabajó como contable de una mercantil de Alicante dedicada al asesoramiento a otras empresas sobre sistemas de calidad, dirección y gestión empresarial. El procesado se aprovechó de su cargo y relación de confianza con el dueño de la empresa para realizar diversos movimientos con las cuentas bancarias de la mercantil para la que trabajaba con el fin de lograr un «enriquecimiento ilícito».

Así, obtuvo las claves para operar en la banca por internet y falsificó la firma del empresario en 136 talones bancarios durante 2012 y 2013, años en los que realizó reintegros por valor de 53.175 y 41.435, respectivamente. Además de estos reintegros y otras operaciones con una tarjeta de crédito por importe de 5.400 euros, alquiló un piso para vivir en Alicante a nombre de la empresa y parte de la renta la abonó con transferencias de la empresa sin estar autorizado para ello.

Por otro lado, realizó ingresos en la cuenta de la empresa de dinero de una persona a la que gestionaba su patrimonio y le propuso invertir en productos financieros de alta rentabilidad. Al final el perjuicio a este particular llegó a los 28.000 euros y a la empresa a casi 69.000, indica el fallo de la Sección Décima.