La Policía Nacional investiga la muerte, ayer a última hora de la tarde en la alicantina calle Casiopea, de un hombre de unos 40 años de edad que se precipitó desde un cuarto piso. Los agentes analizan las circunstancias de este suceso al haber detectado que el fallecido, que era cocinero, tenía una temperatura corporal muy elevada y que podría haber ingerido algún tipo medicación de las que tenía recetadas, que a su vez podría haber tenido algún efecto sobre su salud que le provocara algún tipo de reacción.

El fallecido estaba solo en casa cuando ocurrió la tragedia. Su mujer, que fue atendida de un ataque de ansiedad cuando conoció la noticia, estaba en el trabajo y su hijo tampoco se encontraba en el piso. Según las invetigaciones, la víctima tenía una temperatura muy elevada cuando se precipitó al suelo desde su vivienda. De hecho, carecía de ropa porque acababa de salir de la ducha. Los agentes encontraron la vivienda muy revuelta.