La Guardia Civil y Aduanas han interceptado más de 702 kilos de cocaína en un contenedor llegado a una de las terminales del puerto de València, droga que iba oculta en mochilas dentro de un contenedor procedente de Panamá y que hubiera alcanzado en el marcado un valor de 90 millones de euros. El alijo iba a ser introducido con el método del gancho ciego o perdido, en el que colocan la droga en bolsas dentro de contenedores con mercancía legal y las extraen al llegar a puerto. En la operación no se han practicado detenciones.

Según informó ayer la Delegación del Gobierno en la Comunidad Valenciana, esta operación se ha desarrollado gracias a la investigación y la revisión de contenedores que realiza la Unidad de Análisis de Riesgos de la Aduana de Valencia y la información que llega por la cooperación internacional con otras agencias antidroga.

El delegado del Gobierno, Juan Carlos Moragues, asistió ayer, junto al coronel Jefe de la VI Zona de la Guardia Civil, Amador Escalada y la jefa de la dependencia regional de Aduanas, Mariví Abad, a la presentación de esta operación. Moragues destacó que estas operaciones «no son fruto de la casualidad ya que detrás hay un arduo trabajo tanto de análisis de información como de investigación para poder detectar la llegada de droga en los miles de contenedores que se mueven en el puerto de València».

La Unidad de Análisis de Riesgos de la Aduana de València, que está integrada por funcionarios de Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria y agentes de la Oficina de Análisis e Investigación de la Guardia Civil de Valencia, en colaboración con el Equipo contra el Crimen Organizado (ECO) de Alicante, intervino el pasado 13 de septiembre en el puerto de València 28 mochilas de color negro.

Esas mochilas contenían las 702 pastillas de cocaína, de un peso aproximado de un kilo cada una de ellas, ocultas en un contenedor procedente del puerto de Manzanillo, en Panamá, y con destino final en el puerto de València.