Agentes de la autoridad suiza encontraron ayer sobre las doce del mediodía a Lucía Cristo, la joven de Granja de Rocamora que se encontraba en paradero desconocido desde la madrugada del pasado sábado. La joven, de 23 años, fue encontrada desorientada en una zona boscosa y con signos aparentes de amnesia, aunque sin importantes daños físicos. Poco después fue trasladada en ambulancia a un centro hospitalario.

El padre de Lucía, Eduardo Cristo, relató ayer tarde a INFORMACIÓN que su hija se encontraba ingresada en un hospital de Suiza con el fin de practicarle diversas pruebas. La mujer permanece incomunicada y la policía está tratando de aclarar las causas de lo ocurrido el pasado sábado, cuando su coche fue hallado volcado en una curva y con sus pertenencias dentro. Según la prensa suiza, fue localizada a un kilómetro del lugar donde encontraron su coche.

Según sus familiares, la joven podría haber permanecido durante algo más de tres días vagando por el bosque y sin apenas comer ni beber. Presenta algunas heridas en los brazos que podrían haber sido fruto del accidente de coche que sufrió. No obstante, la policía prosigue con la investigación para determinar cómo se desarrollaron exactamente los hechos y realiza indagaciones para descartar que haya sido retenida por alguna persona.

El padre de la joven, su hermana, su tía y un cura de Granja de Rocamora que es amigo de la familia, se habían desplazado ayer por la mañana a Suiza para seguir de cerca las labores de búsqueda. A las 17 horas de ayer seguían en la puerta del hospital donde estaba ingresada a la espera de encontrarse con ella. «Estamos viendo qué dicen los médicos para saber si es conveniente verla ya o no, porque no recuerda ni quién es», indicó Eduardo Cristo.

La desaparición de Lucía ha causado una gran conmoción en los últimos días. La joven vive desde hace casi un año en dicho país, donde trabaja como cuidadora de niños, y su pista se perdió la madrugada del pasado 26 de agosto, cuando su coche fue hallado accidentado en una carretera de montaña y con todas sus pertenencias, pero sin rastro de ella.

Fue el pasado sábado cuando el vehículo que conducía la joven, un Audi A3 gris, propiedad de la familia para la que trabaja como canguro, fue encontrado «volcado» en una curva cerrada a las seis de la madrugada en la zona de Les Monts de Corsier, cerca de Riviera Vaudoise (Suiza). Dentro del vehículo sólo quedaban sus pertenencias, pero ni rastro de ella.