Dos empresarios de 51 y 24 años, padre e hijo, han sido detenidos por la Guardia Civil como presuntos autores de una estafa superior a los 350.000 euros a agricultores de la Vega Baja y Murcia que les vendieron 800 toneladas de cítricos y no les pagaron el total del precio acordado.

Agentes del Equipo ROCA de Torrevieja, dedicado a investigar robos en el campo, ha esclarecido en apenas un mes una presunta estafa de los dueños de dos empresas dedicadas a las compra y distribución de cítricos que adquirieron la producción de limones a agricultores para distribuir la mercancía a varias cadenas de supermercados.

Los implicados usaban coches de alta gama, relojes de marca y vestían de forma elegante. Así se presentaban ante los agricultores para darles buena impresión y ganarse su confianza para alcanzar un acuerdo pese a que sabían de antemano que carecían de fondos y no iban a pagarles la mercancía.

Cuando conseguían el primer contrato daban a los agricultores un anticipo sobre el precio total de venta y acordaban pagar el resto al finalizar la recolección. Para ellos les aportaron pagarés a 45, 60 o 90 días, pero antes de que se cumplieran la fecha renegociaban los plazos para que no los entregaran en los bancos al no disponer de fondos.

Mediante engaños iban alargando los plazos a pesar de que sabían que los agricultores nunca llegarían a cobrar y buscaban nuevos agricultores a los que convencer. Sin embargo, la paciencia de los agricultores se agotó después de meses y meses sin cobrar y los empresarios estaban prevenidos para posibles represalias.

Los empresarios fueron denunciados y durante la detención de uno de ellos cuando circulaba en uno de sus coches los agentes descubrieron que llevaba debajo del asiento del conductor una pistola marca «Sig Sauer» del calibre 9 mm. Parabellum, con el cargador lleno y un cartucho en la recámara, lista para ser utilizada.

Tras las detenciones la Guardia Civil realizó registros y descubrió que tenían más rifles y escopetas, tanto en su despacho como en su domicilio. En total les intervinieron tres escopetas de caza del calibre 12, un rifle del calibre 416, y dos pistolas, una de ellas inutilizada legalmente.

Anulación de licencias

Según la Comandancia de Alicante, aunque tenían licencia de armas para tiro deportivo y caza, «la legislación es muy estricta y es requisito imprescindible carecer de antecedentes penales, por lo que además de proceder a su incautación, se ha iniciado el trámite para anular las licencias de armas correspondientes».

La detención se ha realizado hace unos días tras el análisis de la documentación presentada por los estafados. Los dos detenidos han sido acusados por la Benemérita de ocho delitos de estafa en la compra-venta de 800 toneladas de limones, por valor de unos 350.000 euros.

Las estafas fueron cometidas en Benejúzar, Almoradí, Bigastro, Daya Nueva, Orihuela y Murcia. La investigación continúa abierta y no se descarta que aparezcan nuevos perjudicados.