La provincia de Alicante, como el resto del país, ya se encontraba en alerta 4 antiterrorista pero los atentados del jueves en Barcelona y Cambrils han motivado que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad intensifiquen aún más si cabe la vigilancia en zonas de gran afluencia turística y en estaciones de tren y aeropuerto. El Gobierno decidirá hoy si el nivel de alerta se aumenta, lo que supondría que el despliegue policial se complementara con presencia militar en las calles.

La presencia policial en zonas de aglomeración turística de Alicante era ayer más que evidente. Además del dispositivo de agentes fuertemente armados en la estación de trenes de Alicante y en el aeropuerto de Alicante-Elche, en los accesos a la playa del Postiguet llamaba la atención la presencia de los efectivos de la Unidad de Prevención y Reacción (UPR) de la Brigada de Seguridad Ciudadana de Alicante. En la playa de San Juan el despliegue contó con agentes uniformados de la Policía Local y agentes de paisano de la Policía Nacional.

Además de blindar la provincia con agentes, el «modus operandi» de los últimos atentados yihadistas en Europa ha conllevado que se obstaculice con maceteros y bolardos el paso de vehículos a paseos de gran afluencia de personas. En Alicante sólo había algunos maceteros, pero tras el atentado de Barcelona el Ayuntamiento comenzó a instalar más obstáculos físicos durante la madrugada y la mañana de ayer en los paseos de la playa de San Juan, Urbanova, Postiguet y Explanada, entre otros puntos. El objetivo es prevenir en estas zonas de masiva afluencia de turistas ataques como los de las Ramblas de Barcelona y en Cambrils.

Los subdelegados del Gobierno de Alicante, Valencia y Castellón mantuvieron ayer una reunión en València para analizar la situación con los responsables de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, Emergencias, CNI y Federación de Municipios y Provincias, entre otros. El subdelegado del Gobierno en Alicante, José Miguel Saval, explicó a este diario tras el encuentro que «no se puede pedir más trabajo a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, pero vamos a intensificar la vigilancia antiterrorista sin dejar de atender los servicios ordinarios».

El subdelegado del Gobierno en Alicante expresó sus condolencias por los fallecidos en los atentados y pese a la intensificación de la vigilancia quiso lanzar un «mensaje de tranquilidad a la población» porque no existe una información concreta o datos que apunten a la posible comisión de ataques yihadistas en la provincia o en otros puntos de la Comunidad Valenciana. Saval convocará la próxima semana una reunión provincial de seguridad y pidió colaboración a la población para que «no nos dejemos ocupar los espacios de libertad por estos criminales».

Por otra parte, el Ayuntamiento de Benidorm acordó ayer reforzar los dispositivos de bloqueo al tráfico rodado en las principales zonas peatonales de gran afluencia turística, como las calles Gambo, Paseo de la Carretera, Martínez Alejos o los paseos marítimos. Así se decidió ayer en una reunión de seguridad donde se trazaron las zonas con más necesidades de actuación y se acordó incrementar el número de más obstáculos como remolques, bolardos o maceteros. Benidorm ya aplica estas barreras en las citadas zonas desde las pasadas Navidades, cuando Interior reclamó por primera vez a los municipios tomar este tipo de medidas de seguridad. Además, el edil de Seguridad, Lorenzo Martínez, indicó que también se modificarán los turnos de la Policía para que «haya más presencia de agentes en la calle y durante más horas al día». Otro municipio turístico de la provincia como Torrevieja también han establecido dispositivos para bloquear el acceso de vehículos a los paseos con mayor presencia de turistas.

Asimismo, la Generalitat reforzará la seguridad en núcleos turísticos, ferrocarriles de su competencia y en otras infraestructuras «siempre en colaboración con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado», según el director de la agencia autonómica de Emergencias, José María Ángel, informa Efe. Ángel detalló que ya hay en marcha un plan de seguridad pero además aquellas poblaciones turísticas o que se dispongan a celebrar fiestas contarán con más seguridad.