Los Mossos d'Esquadra localizaron ayer nuevos restos biológicos entre los escombros de la casa de Alcanar en la que preparaban explosivos los terroristas que han atentado en Barcelona y Cambrils (Tarragona), por lo que investigan ahora si corresponden a un nuevo cadáver. Según informaron fuentes de la investigación, los restos, de origen humano, están siendo analizados para comprobar si corresponden a un nuevo cadáver de uno los supuestos miembros de la célula, que desde hace meses preparaba un atentado de gran alcance en Barcelona, utilizando explosivos.

La casa de Alcanar, en la que los terroristas manipulaban sustancias explosivas, se derrumbó la madrugada del pasado jueves, tras lo cual se localizó un cadáver entre los escombros. Además, otro de los ocupantes del inmueble, que resultó herido, es uno de los cuatro detenidos por el momento por los Mossos d'Esquadra por su supuesta vinculación con los atentados de Barcelona y Cambrils. Tras el hallazgo de estos restos biológicos, los investigadores tratan de determinar ahora si se trata de un segundo cadáver de otro supuesto terrorista.

La investigación tras el doble atentado yihadista en Barcelona y Cambrils apunta a que se utilizó una furgoneta para arrollar a viandantes después de que en la noche del miércoles al jueves se frustrara su plan para transportar explosivos en una acción criminal que podría haber dejado aún más víctimas mortales. Este primer plan fue el que se habría ideado en la casa de Alcanar donde se han hallado explosivos y abundantes bombonas de gas butano que, según la tesis policial, habrían sido utilizadas como carga explosiva para cometer uno o varios atentados.

En la casa de Alcanar aparecieron los restos de una persona que falleció como consecuencia de una fuerte explosión que destruyó por completo esta vivienda en la urbanización Montecarlo. Otras siete personas resultaron heridas y, según los Mossos d'Esquadra, al menos una de ellas está directamente implicada con la célula terrorista. Esta última se encuentra hospitalizada y ya ha salido de peligro.

El que la casa de Alcanar pudiera ser un centro de operaciones fue desvelado por primera vez el jueves por la noche por el mayor de los Mossos, Josep Lluís Trapero, después de que por la tarde se produjera una segunda explosión durante las tareas de desescombro en el marco de una investigación que, inicialmente, se conectó con un asunto vinculado con el narcotráfico. Los investigadores analizan dos depósitos con productos explosivos caseros que fueron descubiertos cuando se procedió al desescombro.