El penal alicantino de Fontcalent ha sido objeto de una nueva agresión de un recluso a uno de los funcionarios, según denunció el sindicato APFP. El interno se puso agresivo con un grupo de funcionarios y uno de ellos recibió un impacto en la cara en el momento en que trataban de reducirlo. Una vez inmovilizado, el preso comenzó a proferir insultos y amenazas graves al personal. Para el sindicato el creciente número de agresiones al personal se produce en medio de una sensación de «impunidad» y «desfachatez» de algunos reclusos, que se ve abonada por la «inacción» de los responsables de prisiones, que, a su juicio, en lugar de abordar el problema intentan relativizar la gravedad de los sucesos. En este sentido, recordaron que han pedido en dos ocasiones el cese del secretario general de Instituciones Penitenciarias, Ángel Yuste.

Por otro lado, el sindicato Acaip, mayoritario en prisiones, denunció ayer una nueva plaga de ratas y de cucarachas en el recinto penitenciario alicantino. Desde el sindicato se consideró «ineficaz» la desratización que desde el centro afirman que se hace de forma periódica. Los funcionarios se encontraron varias ratas que salían corriendo de los lavabos. Según el sindicato, la presencia de roedores es continua durante los servicios de noche, hasta el punto de que se han llegado a comer el techo de una de las oficinas.

Según Acaip, la diferencia con otras ocasiones es que esta vez la aparición de las ratas coincidió con el momento de la cena de los presos. Acaip denunció la insalubridad de las instalaciones, donde las ratas y las cucarachas poco a poco van invadiendo los espacios habitados de la prisión. A juicio del sindicato, todos estos hechos empeoran cada vez más las condiciones de trabajo en la prisión, con un grave problema de falta de medios y de personal, provocando un estrés adicional.