La mujer hallada muerta en su domicilio de La Bisbal del Penedès (Tarragona) la noche del pasado martes, 4 de julio, falleció asfixiada, según ha determinado la autopsia, informan los Mossos d'Esquadra.

La víctima, de 63 años, no mostraba signos evidentes de violencia, pero finalmente la autopsia ha revelado que la muerte fue por asfixia, por lo que los Mossos investigan el homicidio y no descartan ninguna hipótesis.

La mujer vivía con su marido, su hija y su yerno en una casa unifamiliar de La Bisbal del Penedès desde hacía alrededor de un año.

La hija de la víctima descubrió el cadáver el pasado martes sobre las 23.30 horas en el comedor de la vivienda y con la ventana abierta.

Una de las habitaciones estaba revuelta y los familiares declararon que faltaban unos 2.000 euros de un monedero, por lo que en un primer momento se investigó como un robo, a la espera de los resultados de la autopsia.