Agentes de la Policía Nacional han detenido en San Vicente del Raspeig a un hombre como presunto autor de un delito de violencia de género. El arresto ha sido posible gracias a que su mujer acudió sin dudar a una comisaria de policía a pedir ayuda tras encontrar varios manuscritos de su marido en los que la amenazaba. Agentes especializados de la UFAM acompañaron a la víctima hasta su vivienda, donde sorprendieron al arrestado con dos escopetas de caza y en un estado de evidente nerviosismo.

Acudió a primera hora a comisaría

La víctima, esposa del detenido, se personó en la Comisaría de Alicante a primera hora de la mañana para interponer una denuncia por un presunto delito de malos tratos y amenazas en el ámbito familiar. La mujer, contó a los policías que había encontrado unas cartas manuscritas en su vivienda en las que su marido se despedía de sus hijos. Ante las lecturas de las mismas intuyó que su pareja podría estar ideando un plan para matarla. Además, las constantes llamadas recibidas a lo largo del día por parte del detenido, en las que le insistía en que la mujer acudiera al domicilio de manera urgente, le hicieron sospechar aún más de que su marido pudiera estar planeando acabar con su vida.

Ante tales hechos, policías adscritos a la Unidad de Atención a la Familia (UFAM) de la Brigada de Policía Judicial de Alicante, especializados en este tipo de delitos, acompañaron a la mujer hasta el domicilio. Fue allí, cuando los agentes irrumpieron en la vivienda, momento en el que se produjo la detención. Los policías sorprendieron al hombre en un alto estado de nerviosismo y en posesión de dos escopetas de caza municionadas.

El detenido escondió una de las armas, perfectamente municionada, tras una de las puertas de la casa. Según manifestaba en varios manuscritos encontrados por los agentes su intención era la de acabar con la vida de su mujer y con la suya propia.

Una carta de despedida y 16.000 euros para su hija

Los policías encontraron debajo de un cojín del sofá tres notas manuscritas por el detenido, en las cuales se despedía de su hija y de su yerno, y en las que se intuían las intenciones de acabar con la vida de su mujer. Además, también encontraron 16.000 euros que el detenido les había dejado para que siguieran adelante a partir de ese momento con sus vidas.