La Policía Nacional ha desarticulado una banda formada por siete personas que estaba especializada en el robo en establecimientos comerciales en Alicante. Además, a varios de los miembros también se implica en la comisión de varios robos de vehículos, turismos que utilizaban para perpetrar los asaltos.

El modus operandi utilizado por la banda siempre era el mismo. Esperaban a que anocheciera y circulaban por la ciudad en un vehículo, propiedad de alguien de la banda o sustraído esa misma noche hasta el establecimiento marcado como objetivo. Una vez allí accedían al interior forzando las persianas, fracturando los bombines o apalancando las puertas, y sustraían todos los objetos de valor que hubiera en su interior.

Cuando eran sorprendidos cometiendo alguno de sus asaltos no dudaban en darse la fuga poniendo peligro la vida de los peatones y del resto de conductores. Conducían de manera temeraria, saltándose semáforos o tomando vías de dirección prohibida a gran velocidad, por lo que también se les imputa la comisión de tres delitos contra la seguridad vial.

La banda operaba de manera rutinaria, incluso habían semanas que asaltaban establecimientos todas las noches. Normalmente los robos los cometían en locales del centro de la ciudad de Alicante, aunque los investigadores también han concretado que cometieron robos en Benidorm y Mutxamel, según informó ayer la Policía Nacional. La banda daba salida casi inmediata a los objetos sustraídos a través de locales de compra y venta de segunda mano o receptadores, o incluso los intercambiaban por droga.

A los miembros de la banda se les imputa la participación en nueve delitos de robo con fuerza en establecimientos, tres delitos contra la seguridad vial, tres robos en vehículos y un robo con violencia. Tres de ellos han ingresado en prisión.