La desarticulación hace dos meses de una red de dopaje en una operación dirigida por un juez de Dénia ha supuesto el mayor golpe en Europa al tráfico de anabolizantes y medicamentos falsificados. Así lo anunció ayer la Guardia Civil en la presentación del balance de esta operación, en la que fueron se incautaron de más de tres millones de dosis de productos dopantes y fueron detenidas 14 personas en Alicante, Valencia, Málaga y Valladolid, como ya adelantó este diario el pasado mes de marzo.

La Benemérita calcula que durante los últimos tres años la red ha ingresado unos 500.000 euros gracias a estas actividades ilícitas. La organización llegó a realizar 3.340 envíos de estos medicamentos prohibidos a gimnasios de España y otros países, según informa Efe.

La denominada «operación Dianu» ha permitido desmantelar una trama dedicada a la elaboración, falsificación y distribución de medicamentos, anabolizantes y sustancias prohibidas en el deporte.

El juzgado de Instrucción número 1 de Dénia ha dirigido esta operación, ya que fue en la Marina Alta donde la Guardia Civil detectó la presencia de a un matrimonio que presuntamente se encargaba de recibir las sustancias ya terminadas o brutos desde China o India. Dicha mercancía la recogían terceras personas para mantenerse en el anonimato y el matrimonio la almacenaba hasta que se enviaba a los miembros de la organización asentados en la provincia de Málaga. La pareja también realizaba pequeñas transacciones en Dénia y otros puntos de la provincia. Tres de los implicados de Dénia -todos en libertad- han sido asistidos por los abogados Francisco Galiana y Roberto Sánchez.

La Guardia Civil realizó 25 registros en viviendas, gimnasios, comercios y almacenes de las cuatro provincias donde detuvieron a 14 personas e intervino más de 120 tipos de sustancias diferentes, entre ellas esteroides-anabolizantes, hormonas, principios activos y excipientes y potenciadores sexuales.

La célula de Málaga estaba compuesta por siete personas, una de ellas médico en activo, y dirigida por un famoso preparador del mundo del culturismo, Paco Mula, quien ha ganado numerosos títulos y regenta dos gimnasios en Málaga. Esta persona presuntamente se encargaba de la distribución de sustancias por toda España y países del extranjero. En Málaga disponían de un laboratorio y varios lugares de almacenamiento donde decomisaron gran cantidad de medicamentos. Asimismo, en una casa decomisaron 2,7 kilos de cocaína.

En Valladolid también había dos implicados, uno de ellos un destacado culturista en activo, preparador y propietario de dos gimnasios. Eran clientes destacados de la célula de Málaga, de la que obtenían la mayoría de productos terminados para su distribución en la provincia. En la provincia de Valencia se realizó igualmente un registro en una tienda de nutrición.

Según el comandante jefe del grupo de Delincuencia Especializada de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, Juan Jesús Reina, la red recibía las sustancias en ocasiones ya envasadas con marcas propias y sin ningún tipo de control sanitario, informa Efe. En muchas otras ocasiones, el envasado se hacía en Málaga y la red usaba ilícitamente el nombre de un famoso laboratorio para ofrecer una imagen de mayor credibilidad y en sus etiquetas mencionaba que el producto había sido elaborado en países como Alemania.