Un hombre ha aceptado una pena de un año de prisión por colocar un teléfono móvil en los bajos del coche de su expareja, residente en el municipio de Sant Joan, para controlar sus movimientos, según confirmaron a este diario fuentes cercanas al caso. El juicio se ha cerrado con una conformidad esta semana en un juzgado de lo Penal de Alicante, donde el acusado admitió los hechos pero adujo que no trataba de espiar a su expareja, sino que intentaba saber si ella tenía intención de llevarse al hijo que tenían en común fuera del país.

La pareja había terminado su relación dos años atrás y ella presentó denuncias por malos tratos contra él, pero fue absuelto en dichos procedimientos.

El hombre estaba acusado de un delito contra la intimidad por hechos ocurridos el 14 de abril de 2014 cuando la expareja de éste descubrió el dispositivo que le había colocado en los bajos del coche. Dicho artefacto consistía en una caja anclada con dos imanes con un teléfono móvil en su interior con la aplicación de «alerta de buscar mi iPhone» activada, un servicio que permite localizar el teléfono en tiempo real mientras tenga batería. Se trataba de un teléfono viejo, sin línea y con el GPS activado, con el que el acusado podía tener acceso en tiempo real de dónde estaba el teléfono y por tanto el coche de su expaareja.

Inicialmente desde la Fiscalía se reclamaba una pena de un año y medio de cárcel por un delito contra la intimidad, pero rebajó la petición a un año después de que el procesado lo admitiera. El Código Penal establece en su artículo 197 que quien «para descubrir los secretos o vulnerar la intimidad de otro, sin su consentimiento, se apodere de sus papeles, cartas, mensajes de correo electrónico o cualesquiera otros documentos o efectos personales o intercepte sus telecomunicaciones o utilice artificios técnicos de escucha, transmisión, grabación o reproducción del sonido o de la imagen, o de cualquier otra señal de comunicación, será castigado con las penas de prisión de uno a cuatro años y multa de doce a veinticuatro meses». Las fuentes consultadas por este diario señalaron que con el acuerdo alcanzado se suspenderá la pena al acusado, al no tener antecedentes.