La Audiencia de Alicante ha condenado a cuatro hombres, tres británicos y un súbdito de Surinam, por montar un laboratorio de anfetaminas en una casa rural del término de Alcalalí, en la Marina Alta.

Según el Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana (TSJCV), la Sección Tercera de la Audiencia alicantina ha impuesto cuatro años y medio de prisión por un delito contra la salud pública al cabecilla del grupo, P.J.F., de 54 años, quien preparaba los productos y el laboratorio para «cocinar» las pastillas psicotrópicas. El tribunal le considera el encargado de financiar todo el proceso productivo de la droga y del abastecimiento del equipo y los ingredientes.

Los otros miembros del grupo llegaron a un acuerdo con el fiscal por el que reconocieron los hechos y se declararon culpables, por lo que vieron reducida la pena de seis años de prisión a dos años, en el caso de un acusado defendido por el abogado Francisco Galiana Botella, y a tres años y dos meses de prisión, en el caso de las otras dos personas, defendidas por los letrados José Manuel Yepes y Jorge Martínez Navas.

Los hechos sucedieron a lo largo de 2014 cuando los planes de los cuatro condenados fueron puestos al descubierto en el curso de otra investigación contra el tráfico de drogas dirigida por un juzgado de Dénia, que se saldó con la incautación de 167 kilos de cannabis en el Reino Unido. Los pinchazos telefónicos autorizados en esa operación permitieron descubrir los planes de los acusados para elaborar anfetaminas. Para ello, compraron los productos químicos, buscaron al 'cocinero' y alquilaron una casa rural en Alcalalí para montar el laboratorio.