Los padres de la menor que sufrió el acoso supuestamente de cuatro compañeros en un colegio de Alicante decidieron cambiarla de centro y denunciar ante la Policía Nacional los hechos "alertados por la pediatra".

La menor acudió a los servicios sanitarios tras sufrir un ataque de ansiedad después de que el pasado curso y en el inicio de éste, presuntamente sufriera el acoso de cuatro compañeros, tres chicas y un chico, según ha confirmado en rueda de prensa la portavoz de Participación Ciudadana de la Comisaría Provincial de Alicante, Marta García.

La primera detención se llevó a cabo el pasado día 10, ha explicado la portavoz policial, que ha confirmado que los cuatro chicos, de 14 años, ya han pasado ante Fiscalía de Menores. "Este tipo de situaciones solo tienen una salida que es la denuncia", ha advertido García, quien ha recalcado que la sociedad no puede permitir que "ni un solo menor más sufra por un tema de acoso escolar".

García ha detallado que los cuatro acosadores mantuvieron su acoso a través de la redes sociales. El acoso se inició el pasado curso "con humillaciones, instigaciones e insultos", pero la menor "no dijo nada porque las víctimas sufren la situación en silencio", y se mantuvo al inicio del actual, ha señalado la portavoz, que ha desvelado que los padres optaron por el cambio de centro alertados por la pediatra de la menor "tras sufrir el ataque de ansiedad".

Asimismo, ha indicado que los cuatro detenidos llegaron a acosar a la víctima "en la puerta de su casa" y a crear "un perfil falso" en una red social "donde continuamente se metían con ella". "El problema es que cuando entran en juego las nuevas tecnologías, el acoso dura las 24 horas al día, los 365 días al año", ha hecho notar.

Buena respuesta del centro

Sobre la víctima, García ha dicho que "no está bien" pero ha indicado que "el primer paso es evidenciar el problema, y una vez que se evidencia hay soluciones y lo que no se puede hacer es victimizarla". Así, ha señalado que entiende que los padres decidieran sacarla del centro y "la respuesta del centro es buena, están involucrados, y han detectado que existía un problema. Pero lo más importante es cuidar a la menor".

Además, ha indicado que la chica ha "exteriorizado" la situación, "lo que en un caso de acoso escolar es básico, porque al final un niño asume que se merece el mal trato de sus compañeros y eso no se puede permitir".

Por otra parte, en cuanto a la gestión del uso de las redes sociales, la portavoz policial ha subrayado que debe ser "compartida" entre padres e hijos porque "no se puede prohibir" que un menor se abra una cuenta en una red social ya que existe "absoluta disponibilidad de acceso a Internet en cualquier sitio y se deben concienciar".

La agente ha destacado que la Policía trabaja en el Plan Director para la Convivencia Escolar desde hace cinco años y en ese sentido se dan charlas sobre el acoso escolar y "el peligro de Internet". "Cada vez los colegios están más concienciados, pero la salida es la denuncia", ha insistido como recomendación a los padres.

En ese sentido, Participación Ciudadana de la Policía trabaja en la concienciación del uso de las redes sociales y "sobretodo intentando que los menores entiendan que lo que hacen en Internet tiene una repercusión real en su vida, en este caso una detención".