La experiencia es un grado y no se equivocaron unos agentes de la Guardia Civil de El Campello que vieron salir andando de una gasolinera a un delincuente habitual del municipio el pasado sábado por la noche y al ver que trataba de ocultar algo y mostraba una actitud esquiva procedieron a darle el alto. El sospechoso, con numerosos antecedentes, acababa de atracar una gasolinera y trato de huir a la carrera pero fue arrestado y tras pasar a disposición judicial ha ingresado en prisión.

El atraco fue cometido en la estación de servicio Petronor El Amerador, situada en el kilómetro 122,500 de la carretera N-332, dentro del término de El Campello. El empleado de la gasolinera fue encañonado con una pistola que resultó ser simulada -de aire comprimido- y sustrajeron 240 euros que había en la caja registradora.

Cuando los agentes dieron el alto al sospechoso para preguntarle qué hacía en esa zona alejada del casco urbano vieron cómo arrojaba algo hacia unos matorrales al tiempo que aceleraba el paso iniciando una carrera.

Rápidamente le interceptaron los agentes y descubrieron que llevaba en el bolsillo de su chaqueta varios billetes arrugados, como si se hubiesen cogido con prisa, y también portaba en el cuello un pañuelo oscuro tipo bandolero.

Tras inmovilizar al sospechoso rastrearon la zona donde arrojó un objeto y localizaron una pistola metálica de gas comprimido del calibre 4,5 mm.

Acto seguido la Guardia Civil se dirigió a la gasolinera de la que vieron salir al ahora detenido y se encontraron al empleado bajo un gran estado de ansiedad. El trabajador les explicó que acababa de atracarle un hombre español con la cara cubierta con un pañuelo y tras ser amenazado con una pistola le entregó 240 euros de la recaudación.

El hombre interceptado fue detenido por un robo con violencia e intimidación y el juzgado acordó su ingreso en prisión.