El empresario Enrique Ortiz se mostró ayer satisfecho con la sentencia que le absuelve de un fraude fiscal porque «jamás he defraudado a la Hacienda Pública». El promotor señaló que la absolución le daba fuerzas «para seguir trabajando por la sociedad alicantina». Sin embargo, echando la vista atrás lamentó que el plan parcial La Condomina, donde se encuentran los terrenos que motivaron este pleito, no se hubiera aprobado por el Ayuntamiento, «porque era un proyecto ambicioso capaz de traer mucha inversión y la ciudad, ni entonces ni ahora, puede permitirse renunciar a proyectos que generan empleo y riqueza». El abogado de Ortiz, Francisco Ruiz Marco, se mostró cauto porque el fallo puede ser aún recurrido, aunque subrayó que la argumentación de la juez «era muy sólida» y constata que no hubo un perjuicio a Hacienda.
Por su parte, Rafael Galea también expresó su satisfacción con el fallo «porque esto es lo que nosotros hemos mantenido desde el principio, que era un tema contable y que no hubo ningún perjuicio a Hacienda». Galea acudió ayer a primera hora al juzgado de lo Penal de Alicante acompañado de su abogado, Javier Gerona, y del asesor jurídico de Hansa , así como de otro de los acusados, Vicente Ballestar, para conocer el sentido de la resolución.
Tanto la Fiscalía como la Abogacía del Estado tienen ahora un plazo de diez días para estudiar si presentan recurso contra la sentencia ante la Audiencia Provincial. Desde el Ministerio Público no se quiso valorar esta posibilidad a la espera de estudiarla en profundidad y ver si hay posibilidad de que prospere.
