Una mujer de 54 años perdió la vida ayer y otras tres personas, entre ellas su hija de 27 años, resultaron heridas graves en un accidente de tráfico ocurrido de madrugada al estrellarse un coche contra una panadería del barrio de San Blas en Alicante. La Policía Local realizó la prueba de alcoholemia a la conductora y dio positivo. Fuentes municipales aseguraron que el coche accidentado no iba huyendo de la Policía como se comentaba ayer entre muchos vecinos del barrio de San Blas ni tampoco perdió el control al esquivar a un camión de la basura. La hipótesis que baraja la Policía Local es que la calzada estaba mojada y el vehículo circulaba a gran velocidad cuando la conductora perdió el control del coche y acabaron estrellándose contra la fachada de una panadería situada en la plaza del General Mancha. El establecimiento ha vuelto a abrir hoy tras arreglar los desperfectos ocasionados por la colisión.

El accidente ocurrió unos minutos antes de las tres de la madrugada. Un Fiat Stylo conducido por una joven de 27 años y donde viajaban también su madre, de 54 años, un menor de 17 años y un joven de 24, circulaba por la avenida de Salamanca y al llegar a la plaza del General Mancha, donde hay una curva a la izquierda, el turismo perdió el control y se estrelló contra la fachada de una panadería.

El fuerte impacto despertó a muchos vecinos y la mayoría salió al balcón de sus casas o se asomó por la ventana para ver qué había ocurrido. «El golpe fue horroroso», recordaba ayer una mujer residente en el barrio. Desde un bar situado junto a la panadería y un comercio Deshoras llamaron de inmediato a la Policía y a los bomberos. Testigos del suceso se dieron cuenta de la gravedad del accidente, que movilizó a varias patrullas de la Policía Local y Nacional y ambulancias.

En el asiento trasero derecho viajaba la madre de la conductora, una mujer de 54 años que fue evacuada con vida al Hospital General de Alicante pero falleció poco después de su ingreso a causa del politraumatismo sufrido, según fuentes municipales y del Centro de Información y Coordinación de Urgencias (CICU). Su hija, de 27 años, fue trasladada al mismo centro sanitario con una fractura de tobillo, mientras que el menor de 17 años sufrió una fractura de fémur y húmero y el joven de 24 años fue evacuado con traumatismos en cara y cuello. El pronóstico al ser hospitalizados era «reservado», según el CICU.

Además de la trágica pérdida de la mujer de 54 años el accidente también provocó daños materiales en la fachada de la panadería. Todos los ocupantes del turismo accidentado eran de Alicante excepto un varón que es originario de Almería, según las fuentes municipales.