El Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil de Alicante ha intervenido 25 primates en una operación contra el tráfico ilegal de especies protegidas, en la que ha investigado a siete personas (cuatro en Alicante, dos en Murcia y una en Sevilla).

Estas siete personas, una de ellas policía nacional en Elche, están investigadas como presuntas autoras de varios delitos relativos a la protección de flora y fauna, pertenencia a organización criminal, falsedad documental y usurpación de estado civil. En la operación, denominada Titisali, también está implicadas otras 25 personas en distintas provincias españolas. Se han practicado registros en tres domicilio y dos locales de venta de animales en la provincia de Alicante, en concreto en Elche, Torrellano, Agost y Algueña, aunque la operación también ha afectado a otras provincias, como Sevilla, Almería y Albacete.

Los 25 ejemplares de primates intervenidos -20 de ellos vivos y cinco muertos- eran ofertados en tiendas de mascotas a particulares.

Según la Guardia Civil, vendieron 67 primates y cada uno de ellos se vendía en el mercado negro por entre 1.800 y 2.000 euros, por lo que se estima que su venta habría generado un beneficio superior a los 130.000 euros.