Adquirir objetos robados a sabiendas de que lo son. La Fiscalía de Alicante ha pedido penas de prisión para los responsables de una empresa de chatarra por la compra de material sustraído. Para el Ministerio Público, las peculiares características del botín intervenido son prueba suficiente para determinar que efectivamente eran objetos robados: 89 tapas de alcantarilla. El material recuperado se completó con otros objetos singulares como treinta barriles de cerveza y cuarenta bombonas de butano.

Los autores materiales del robo no pudieron ser localizados pero el fiscal ha optado por acusar a quienes considera responsables de la compra de estos objetos y les imputa de un delito de receptación. Según el escrito de acusación al que ha tenido acceso este diario, se piden un año y tres meses de cárcel a tres responsables de la mercantil. El caso acaba de llegar a un juzgado de lo Penal de Alicante para ser enjuiciado.

Los acusados son el gerente, el encargado de compras y el cajero de la firma, una empresa dedicada a la compra-venta de chatarra en Alicante. Los tres fueron detenidos después de una intervención en las instalaciones llevada a cabo por el Cuerpo Nacional de Policía en agosto de 2013. Dos de los imputados contaban con antecedentes penales por otros hechos totalmente ajenos a éstos. El Ministerio Público ha pedido el archivo de la causa para otros dos trabajadores de la empresa, al no considerar acreditada su participación en la presunta trama delictiva que ahora se juzga.

Los hechos se remontan al año 2013, en el que se registraron varios robos en la ciudad de Alicante, en los que desaparecieron bombonas de butano, tapas de alcantarilla y barriles de cerveza. Golpes en los que los asaltantes buscaban material metálico para fundirlo o venderlo como chatarra. Los autores materiales de estos robos no pudieron ser localizados, pero sí algunos de los bienes desaparecidos. El material desaparecido fue recuperado durante los registros en la empresa de los acusados. Sobre las tapas de alcantarillado todavía figuraba el logo de la empresa Aguas de Alicante en el momento de la intervención. En total, todos los efectos recuperados durante la intervención policial han sido valorados en 909 euros. Todos estos artículos fueron devueltos en calidad de depósito a sus legítimos propietarios, a la espera de que el en el juicio se dicte a través de una sentencia que dictamine que efectivamente se trataba de material que tenía una procedencia ilícita.

El Ministerio Público sostiene que los acusados sabían perfectamente que los objetos comprados eran de procedencia ilícita y con ellos pretendían obtener un beneficio económico vendiéndolos como chatarra. Las empresas afectadas habían presentado denuncia por estos hechos. El fiscal no ha reclamado indemnización alguna para ellas, ya que entiende que han recuperado los efectos robados y que, en el caso de que los procesados sean condenados después de la vista oral, se procederá a la entrega definitiva.

Desde la Fiscalía de Alicante se está extremando el celo durante el último año con los establecimientos dedicados a la compra de objetos de segunda mano que no hagan un mínimo de comprobaciones sobre cuál es la procedencia del material que se vaya a adquirir. Una máxima que se está aplicando no sólo a los establecimientos de compra de chatarra, sino también en todos aquellos comercios dedicados a la adquisición de joyas y oro de segunda mano que puedan proceder de robos.