La Audiencia de Alicante ha condenado a tres años de cárcel a los administradores de una inmobiliaria por vender viviendas con cargas hipotecarias en el municipio de Beniarbeig en la Marina Alta, según la sentencia a la que ha tenido acceso este diario. El fallo declara probado que los acusados recibieron dinero en efectivo destinado a levantar las cargas hipotecarias de las casas y éstos se quedaron con el dinero. Los procesados deberán indemnizar con 157.456 euros a la afectada.

Los hechos se remontan a diciembre del año 2005, cuando los acusados firmaron un contrato de compraventa con la denunciante de una promoción inmobiliaria en Beniarbeig. En el contrato, se hacía constar la existencia de una carga hipotecaria, estableciéndose modalidades de pago, una de las cuales pasaba por la entrega de la vivienda libre de cargas a la firma de la escritura pública, si antes la compradora pagaba el precio total de la vivienda. El fallo declara probado que los acusados eran conocedores de las necesidades económicas de la promotora, por lo que consiguieron que la cliente entregara el dinero pactado antes de la firma de la escritura. Ambos percibieron el importe total del precio pactado y, en lugar de cancelar todas las obligaciones hipotecarias que pesaban sobre el inmueble, en su propio lucro y beneficio, destinaron las cantidades recibidas a fines empresariales distintos, dejando sin cancelar las cargas y préstamos hipotecarios, relata el fallo. Llegado el día de la escritura pública, los procesados no se presentaron y la afectada tuvo que ir a los tribunales para que se elevara a pública la escritura.