La Generalitat ha asumido la gestión de los juzgados de paz de seis municipios de la Comunidad - tres de ellos alicantinos- a los que dotará, además, con dos funcionarios para a cada uno: un gestor procesal y un auxilio judicial.

Según la Generalitat, las localidades que se beneficiarán de esta medida son San Fulgencio, Pedreguer y San Miguel de las Salinas, en la provincia de Alicante; Almàssera en Valencia y Alcalà de Xivert y Peñíscola, en la provincia de Castellón.

La consellera de Justicia, Gabriela Bravo, ha destacado «el enorme esfuerzo que está haciendo el Consell para modernizar y dotar de recursos materiales y humanos a las instalaciones judiciales de la Comunidad Valenciana».

«Estos juzgados de paz suponen la apuesta por la justicia de proximidad y una forma de asegurar el funcionamiento de órganos que tienen encomendada una función fundamental en materia de cooperación y comunicación entre los ciudadanos de sus municipios y los órganos judiciales del resto de la Comunidad», ha indicado.

La asunción, por parte del Consell, de la gestión de estos juzgados de paz y la dotación de dos profesionales jurídicos para estos órganos unipersonales era una reivindicación histórica de todos estos ayuntamientos.