La Policía Nacional ha detenido a un hombre de 33 años por irrumpir en un bar en Alicante y agredir brutalmente a un cliente, causándole la pérdida de varias piezas dentales, informó ayer la Comisaría. Los agentes intervinieron al presunto agresor un revólver que estaba oculto bajo el asiento de su coche y que tenía el número de serie borrado. Los hechos ocurrieron el pasado 4 de agosto a mediodía, cuando el detenido entró en el local de manera agresiva y empezó a golpear al propietario. En las proximidades le esperaba un coche que conducía otra persona, con el que trataba de darse a la fuga. La rápida llegada de los agentes impidió que el sospechoso escapara.

En el momento de la detención, los agentes vieron que el sospechoso intentaba coger un objeto oculto bajo el asunto y se lo impidieron, encontrando la pistola. El arma estaba cargada con cinco cartuchos. Se le imputan los delitos de lesiones y tenencia ilícita de armas. La mujer que conducía el coche también ha sido arrestada.