Una plantación de marihuana oculta en una zona de corrales y chavolas en las proximidades del barrio alicantino de Rabasa. La Policía Local desmanteló ayer la instalación con cerca de 200 plantas, algunas de ellas modificadas genéticamente para producir mayor número de cogollos. El presunto responsable de la instalación es un joven de 21 años que tenía alquilados los corrales en teoría para tener conejos, gallinas y otros animales de granja, ayer se encontraba en paradero desconocido y la Policía lo tenía en busca y captura por otros delitos.
Los hechos ocurrieron ayer en un distrito de Alicante conocido como barrio Patiño, sito entre las lagunas de Rabasa y el cementerio de Alicante. La Unidad Canina de la Policía Local se encontraba haciendo una intervención por la zona por unos perros abandonados cuando los canes detectaron la presencia de la plantación. Los animales rastrearon el olor de la marihuana hasta la puerta y marcaron cuáles eran los tres corrales que podrían ocultar droga. En alguno de ellos, las plantas eran perfectamente visibles desde la calle.
Los agentes contactaron con el propietario de las tres instalaciones, quien las tenía alquiladas a un joven de 21 años que, en teoría, iba a destinarlas para la cría de conejos, gallinas y otros animales de granja. Dos de los corrales estaban enteramente destinados al almacenaje de las macetas y el tercero era una nave de cerca de 200 metros cuadrados, donde además de la droga se guardaban otros efectos. En uno de los corrales, una de las habitaciones estaba destinada a albergar abono para el cultivo, para el que no se usaban métodos hidropónicos detectados en otras instalaciones similares. Las plantas crecían en macetas que abarrotaban todo el interior del inmueble.
Los agentes de la Unidad Canina y del Grupo Operativo de Intervención Rápida (GOIR) de la Policía Local de Alicante, coordinados con la Policía Judicial de la Comisaría de Alicante. En total, se intervinieron 197 plantas, dos balanzas de precisión, varios cogollos de droga ya preparados, así como una escopeta, dos hachas y un machete. En los recintos, había varios tipos de plantas, pero los agentes han llegado a localizar ejemplares que habían sido modificados genéticamente para proporcionar un número mayor de cogollos que los de una planta normal. Los agentes empezaron a sacar las plantas del interior y a amontonarlas en la calle para cargarlas en un camión, ante la atónita mirada de los vecinos que no daban crédito a la gran cantidad de plantas que salían del interior de los corrales.
El presunto responsable de la plantación se encuentra en paradero desconocido. Las fuentes consultadas por este diario señalaron que ya se encontraba reclamado por otros delitos y que contaba con antecedentes por tráfico de drogas y robos. Los agentes intentaron localizarle en su domicilio ayer sin éxito. Una vez que quedó patente que éste no iba a aparecer en el lugar de la plantación, los agentes acabaron entrando y requisando toda la droga, así como buscando pistas de la implicación del reclamado en otro tipo de actividades delictivas. Las fuentes consultadas por este diario señalaron que en el interior de la nave se han localizado útiles que indican que se ha podido usar para fundir el metal tras robos de cobre.
