Nueva intervención de drogas en la estación de autobuses de Alicante. Los perros de la unidad canina de la Policía Local de Alicante (UCAN) permitieron ayer la detención de un ciudadano de origen suizo de 50 años que llevaba 1,2 kilos de hachís adherido a su cuerpo.

La intervención tuvo lugar sobre las 14 horas en la estación de autobuses de Alicante, donde el perro detector llamado «X» realizaba uno de los controles rutinarios y «marcó» al ciudadano helvético, que procedía de Almería.

Los agentes han procedido a un cacheo superficial y descubrieron que llevaba algo voluminoso adherido al cuerpo. Fue trasladado hasta el cuarto de seguridad y allí se le han intervenido 12 placas de hachís que llevaba cogidas con una faja al cuerpo, por lo que se procedió a su detención como presunto autor de un delito contra la salud pública.