La Guardia Civil de Alicante investiga a tres personas, de entre 19 y 50 años y de nacionalidad hispano-marroquí, por un presunto delito contra la propiedad industrial, tras intervenir 442 máquinas de pedicura eléctricas falsificadas, recambios y cartelería, valorados en unos 11.970 euros, según ha informado el instituto armado en un comunicado.

El pasado mes de abril, en desarrollo de los análisis de riesgos que llevan a cabo los agentes de la ODAIFI (Oficina de Análisis e Investigación Fiscal) día a día en el aeropuerto, en colaboración con el Servicio de Aduanas, los agentes interceptaron un envío procedente de China, que por las características exteriores (caja, envoltorios) y documentales (origen, bajo valor), cumplía los "requisitos" de una posible importación de mercancías falsificadas.

Tras su inspección aduanera, descubrieron gran cantidad de productos para cuidado de pies y uñas, distribuido en carteles, máquinas, repuestos y blisters de la marca SCHOLL.

Los agentes, ante la sospecha de que pudieran ser objetos falsificados, consultaron los datos técnicos existentes en la base de datos de la EUIPO (European Union Intellectual Property Office) y se pusieron en contacto con la marca de los aparatos, con el fin de realizar un estudio técnico que determinase la procedencia de los aparatos.

De este estudio técnico, realizado con personal de la propia marca, se desprende que los aparatos son falsos y son de una calidad inferior a los originales. Por este motivo, la marca interpuso una denuncia por un delito contra la propiedad industrial, por lo que la Guardia Civil dirige ahora una investigación sobre la empresa importadora.

EMPRESA UBICADA EN TEULADA

La citada empresa, con sede en Teulada (Alicante), estaba regentada por uno de los ahora investigados, y su actividad económica no tenía ninguna relación con este tipo de aparatos, si bien, se dedicaba a la venta ambulante en mercadillos, indicador que hizo sospechar a los agentes.

Tras establecer un dispositivo de localización e identificación, los agentes consiguieron saber el lugar donde se encontraba la persona encargada de la empresa, por lo que se dirigieron a su encuentro, en un mercadillo de dicha localidad.

Mientras se levantaba acta al investigado, los agentes comprobaron que, en otros dos puestos cercanos del mismo mercadillo, se vendían el mismo tipo de máquinas, por lo que procedieron a la aprehensión de los mismos y a investigar a los propietarios de esos puestos.

OFICINA EUROPEA DE LA PROPIEDAD INTELECTUAL

Indirectamente, la Oficina Europea de la Propiedad Intelectual (EUIPO), con sede en Alicante ha valorado el coste económico que suponen este tipo de delitos contra la propiedad industrial concluyendo, a través de varios estudios, que se pierden anualmente alrededor de 26.300 millones de euros de ingresos a causa de las falsificaciones de ropa, calzado y complementos, lo cual equivale al 9,7% de las ventas del sector (incluidas las pérdidas de los sectores de fabricación, venta al por mayor y venta al por menor) y supone la pérdida de 363.000 puestos de trabajo.