Un joven se sentó ayer en el banquillo de los acusados por un delito de atentado contra la autoridad al ser imputado por lanzar un petardo contra un agente del Cuerpo Nacional de Policía en el casco antiguo de Alicante durante una noche de las fiestas de Hogueras del año 2013. La Fiscalía le reclama una pena de casi dos años de cárcel por estos hechos, un año y diez meses, según el escrito de acusación al que ha tenido acceso este diario. El Ministerio Público le imputa además una falta de lesiones, por la que reclama una multa de un mes y 15 días con una cuota diaria de doce euros (540 euros).

Los hechos ocurrieron hacia las dos de la madrugada del 20 de junio de 2013 en una calle del casco antiguo de Alicante, donde dotaciones del Cuerpo Nacional de Policía requirieron a un grupo de jóvenes para que se identificara. Según el escrito de acusación al que ha tenido acceso este diario, el procesado, molesto con la actuación policial, encendió un petardo de grandes dimensiones (entre ocho y diez centímetros de longitud) y se lo arrojó a uno de los agentes. El petardo impactó en el pecho del agente y cayó a sus pies donde finalmente estalló. La explosión produjo al funcionario una lesión en el oído izquierdo por la que estuvo en tratamiento durante siete días. El joven negó ayer los hechos en el juicio celebrado en un juzgado de lo Penal de Alicante y mantuvo que él no fue la persona que lanzó el petardo contra el policía, ya que en esos momentos había mucha gente por las calles. La defensa reclama la libre absolución.

Asimismo, el fiscal reclama que el acusado indemnice al agente con 210 euros por las lesiones que sufrió. El juicio quedó ayer visto para sentencia en el Palacio de Justicia.