La Audiencia de Alicante juzgará a partir de hoy un presunto fraude millonario a seis entidades bancarias a través de pólizas de crédito. En el banquillo se sentará un empresario peletero de Elda para quien la Fiscalí solicita cinco años de prisión por un delito de estafa cometido entre los años 2000 al 2002. Entre los testigos de este proceso está el que fuera director general de la CAM Roberto López Abad, al ser la caja uno de los principales perjudicados.

El acusado era administrador de una empresa de encurtidos con sede en Elda y que en el desarrollo de su actividad firmó diversas pólizas de anticipo de crédito con hasta seis entidades bancarias. El acusado solicitó diversos créditos a los bancos, aunque al amparo de dicha póliza presentó a descuento diversos recibos extendidos por él mismo con cargo a sus clientes. Según los escritos de acusación, estas operaciones que servían de soporte a los recibos no eran reales, aunque en otros casos el supuesto fraude se perpetró con otro tipo de contratos. Entre las entidades afectadas que operaban en la época de los hechos se encuentran la CAM, Bancaja, Banco Santander Central Hispano, Banco de Valencia, Banco Español de Crédito y Banco Zaragozano. En el caso de la extinta Caja de Ahorros del Mediterráneo, el procesado suscribió las citadas pólizas de crédito. En virtud de estas operaciones, el acusado acabó adeudando a la entidad 337.487 euros. Además solicitó anticipos para operaciones de importación de mercancías, mediante las que la caja anticipó las compras a los vendedores extranjeros. El fiscal considera que el acusado sabía que no iba a poder pagar «dada la penosa situación económica que atravesaba su empresa». La CAM reclama 607.968 euros al acusado.