Diez acusados admitieron ayer durante un juicio su pertenencia a una organización criminal que explotaba sexualmente a mujeres paraguayas en cinco clubes de alterne de Alicante, Baleares y Cuenca. Por su parte, un undécimo procesado, Marcos M.F., al que el fiscal atribuye ser el cerebro de la red, negó ayer las acusaciones y manifestó que su negocio consistía en el «hospedaje y manutención» de las jóvenes en los locales que controlaba en Villena, Cuenca Mallorca y Baleares. La causa, que se juzga en la Audiencia de Alicante, se dirigía inicialmente contra trece sospechosos, pero uno de ellos ha fallecido y otro se encuentra fugado.