La Fiscalía reclamó ayer penas que suman 234 años de cárcel para R.P.F., de 44 años, acusado de corrupción de menores y abusos sexuales a 16 niños en campamentos celebrados en 2010 y 2011 en la localidad leonesa de Carucedo, por la «contundencia de los hechos y el grave peligro de reincidencia». Así lo defendió el Ministerio Fiscal en sus conclusiones finales del juicio, que quedó visto para sentencia en la Audiencia de León. El procesado llegó a instalar una cámara en los vestuarios de una piscina donde era monitor de natación y de la que se incautaron discos con 19.000 horas de grabación.,El acusado dijo se sentirse «avergonzado».